En la era de la globalización y la información aún persisten mitos y creencias erróneas sobre la sexualidad que se repiten una y otra vez, a pesar de los avances en la educación sexual y de que hay diálogos más abiertos.

El diccionario de la Real Academia Española define como mito a una historia ficticia que encarna algún aspecto universal de la condición humana. Con esto en mente, LA GACETA salió a la calle para conocer cuáles son algunos de los mitos sexuales que rondan a la sociedad tucumana para que sean analizados y explicados por las sexólogas Ivana Andrade y Florencia Arce. Ambas especialistas alertaron que estos conceptos pueden afectar la manera en que experimentamos y entendemos nuestra sexualidad.

“El deseo es espontáneo” - Camila medina, estudiante de 19 años

“De hecho el deseo casi nunca es espontáneo porque vivimos en un mundo tan caótico y en un día a día tan complicado, que tener el deseo a flor de piel puede ser algo que no suceda así de repente. Al deseo, por lo general, hay que trabajarlo y saber diferenciar aquel que es reactivo, de aquel que es espontáneo. El primero de ellos es el que necesita de un estímulo para nacer, mientras que el deseo espontáneo sí surge de pronto. Por otra parte el deseo reactivo puede manifestarse, por ejemplo, cuando mi pareja se acerca, me propone algo y yo acepto. Por eso decimos que es algo que crece a medida que la persona es estimulada. También es importante destacar que el deseo se trabaja, se ejercita y se construye, pero cuando no aparece causa mucha preocupación por eso es una de las consultas más frecuentes que recibimos en el consultorio”, dijo Arce.

“Los jóvenes tienen más sexo que la gente mayor” - Gabriel villagra, comerciante de 23 años

“Por lo general esto suele creerse por dos motivos: hormonas e iniciación. Como cuando empezamos el gimnasio y vamos todos los días con entusiasmo pero quizás con el tiempo cuesta más. Así hay quienes piensan que al empezar a tener relaciones sexuales se lo hace más seguido aunque en realidad el sexo es algo que nos atraviesa a cualquier edad. Incluso, a veces a los más jóvenes se les complica mucho más al no tener un lugar fijo y establecido en donde poder hacerlo, mientras que ese problema los adultos generalmente no lo tienen. Hay muchos jóvenes, por otra parte, que aún tienen desconocimiento sobre temas sexuales. Así se ven inhibidos por diferentes tipos de temores como un embarazo no planeado u otros miedos similares. Los mayores, en cambio, sí se muestran más relajados hoy a vivir su sexualidad y la experiencia también les da más certezas que dudas”, remarcó Arce.

“El varón siempre quiere” - María Emilia Morales, profesora de 30 años

“Esta afirmación no es tan solo un mito, sino que también un prejuicio. La realidad es que el varón vive en el mismo mundo caótico en el que viven las mujeres y puede tener el mismo estrés y problemas que ellas enfrentan. No tiene nada que ver con el género. También se suele decir que el hombre es más hormonal y ese es otro motivo, pero eso tampoco es cierto. Este mito ha provocado que muchas pacientes lleguen a mi consultorio y me digan con preocupación ‘mi novio no quiere tener sexo conmigo, soy yo la que lo tengo que buscar siempre; ¿acaso tiene otra o no me quiere?’. Eso no es  necesariamente así, tal vez ese hombre tiene bajo deseo sexual como cualquier otra persona, pero por ser un varón pareciera que siempre tiene que estar listo o quererlo”, explicó Arce.

“Las mujeres no tienen deseos tan intensos como los hombres” - Juan Ignacio casas, estudiante de 27 años

“Es un mito, pero algo que sí sucede es que muchas mujeres (sobre todo mayores de 30 o 40 años) desconocen totalmente su cuerpo a nivel erógeno. De esta forma no puede haber deseos o pedidos de un encuentro sexual intenso, si vos misma te desconoces.

Es por eso que en la actualidad, tanto los medios de comunicación, como  las redes sociales y especialistas de la psicología y la sexología, tratan de derribar este mito.

Con este fin hoy existen algunos talleres para mujeres donde se habla de deseo, y es sorprendente cuando se les preguntás a las asistentes qué es el deseo o cuál zona de su cuerpo se los genera más, y casi nadie lo sabe explicar.

Muchas también se asombran al hablarle de los orgasmos y descubren que hay diferentes tipos, porque se les abre un mundo nuevo. Todo esto implica desterrar construcciones sociales que nos atraviesan desde hace miles de años, en las que a la mujer se le prohibió ser un ser sexual.

Hablamos específicamente desde el pensamiento estructural que tiene nuestra sociedad.

Hoy las mujeres pueden tener un deseo mucho más intenso pero hay que tener un poco de autoconocimiento y también hacer más actividades, talleres, o instruirse con videos que las ayuden a entender que el deseo no es nada malo y el placer tampoco, porque hubo algún tiempo en el que  eso también generaba mucha culpa entonces. Hay que cambiar eso y explicar lo hermoso que es el placer y que el deseo es parte de todas las personas y no tiene que ver con un género especificó Andrade.

"El objetivo de un encuentro sexual siempre es el orgasmo" - Soledad Pinto, psicóloga de 39 años

“Es un mito porque si una persona va a un encuentra sexual con el objetivo únicamente de tener un orgasmo, puedo asegurar que la va a pasar mal. El fin de estos encuentros debe ser más amplio, Buscar el contacto con el otro, el poder sentir piel con la pie, los aromas, la sensualidad, la idea  de poder explorar momentos de placer.

Si no hay orgasmo no significa que el encuentro sexual no ha sido ideal o perfecto, porque también hay que darle un lugar preponderante a la previa de esa situación en sí y también a los momentos posteriores. El sexo es la suma de muchas cosas y si yo me quedo solo con una parte, no tiene sentido.

La sexualidad no es solo el encuentro sexual en sí, también es mi modo de hablar, de vestir, cómo me relaciono con los otros, si yo puedo reconocer en mí las cosas que me gustan de los otros y las que no para poder trabajarla. Así, el objetivo del encuentro sexual tiene que ser el placer y pasarla bien.

De todas formas so no hay orgasmo y se vuelve motivo de preocupación, eso también es algo que se puede trabajar desde la las terapias, No obstante, hay situaciones que hay que vivirlos y experimentarlas en el aquí y ahora, no estar en las expectativas que me crearon o en el resultado final”, sentenció Andrade.

“La frecuencia del sexo define que tan bien estamos en la pareja” - Karina Rivas, administrativa de 41 años

“En el mundo de hoy para poder tener un buen estilo de vida las parejas por lo general tienen que salir a trabajar ambos, o estudian y se capacitan porque la contemporaneidad las actualizaciones son necesarias todo el tiempo. Por todos estos puntos, la frecuencia de las relaciones sexuales no definen exactamente que tan bien o no están en la relación, porque quizás el sexo no es tan frecuente, pero sí tienen una excelente comunicación o eligen hacer otras actividades juntos como trekking, paseos con amigos u otras parejas. En este contexto hay mucho para analizar y no solo un número”, consideró Andrade.

La importancia de saber

Como reflexión final, Florencia Arce explicó que lla importancia de desmitificar viejas creencias, provoca que nuestra vida deje de depender o reducirse a un mito o prejuicio social. “En efinitiva lo único que hace esta desinformación, es aislarnos y privarnos de  disfrutar de nuestra vida sin prejuicios. Los mitos limitan nuestras lbertades con pensamientos de otros o imposiciones. Sin darnos cuenta nos dejamos levar y al final vemos que nuestra vida se basó en mentiras que nos impidiero el disfrute”, argumentó.

Y sentenció: “a la sexualidad se disfruta y no se la padece. Si nosotros tenemos todos estos prejuicios dentro, es muy difícil relajarnos y disfrutarla como tal, corriendo el riego también de despiertar muchas disfunciones sexuales por miedos y culpas”.