La impotencia y la frustración se apoderaron de John Textor en el Estadio Nilton Santos. El dueño de Botafogo no esperó al final del partido y dejó su palco cuando Racing Club marcó el 2-0, sellando la consagración en la Recopa Sudamericana con un global de 4-0.
Desde el inicio, el equipo de Gustavo Costas dominó la final con un planteo sólido y efectivo. Bien parado en defensa y rápido en las transiciones, Racing golpeó en los momentos justos y desarmó cualquier intento de reacción del conjunto brasileño. Maximiliano Salas y Adrián "Maravilla" Martínez fueron los primeros en probar al arquero John, quien sostuvo el 0-0 durante la primera mitad. Sin embargo, Botafogo nunca logró inquietar a Gabriel Arias, que respondió con seguridad ante los escasos avances del local.
En el complemento, Racing mantuvo su intensidad y encontró la ventaja con un gol de Matías Zaracho, que había ingresado en reemplazo del lesionado Luciano Vietto. Pero el golpe de nocaut llegó a los 24 minutos del segundo tiempo, cuando Bruno Zuculini sacó un potente remate que descolocó al arquero y decretó el 2-0. Fue en ese instante cuando Textor, visiblemente molesto, se levantó de su asiento y abandonó su palco, dejando en evidencia su desencanto con el equipo.
El enojo del presidente de Botafogo con su equipo
El empresario estadounidense, que ha sido una figura controvertida en el fútbol brasileño por su gestión en Botafogo y su participación en el fútbol multi-club, no pudo ocultar su decepción ante una final en la que su equipo nunca estuvo a la altura.
Racing, en cambio, celebró una victoria contundente y volvió a gritar campeón a nivel internacional, con una actuación que quedará en la historia de la Academia.