BUENOS AIRES (por José Luis Ponsico).- El ex presidente de Vélez Sarsfield Raúl Héctor Gámez, uno de los más importantes de la historia del club, manifestó que la entidad de Liniers es la de "mayor prestigio de Argentina".
"No es lo mismo ser popular que tener prestigio", indicó Gámez, de 68 años y con medio siglo viviendo la pasión popular en barriada que une Villa Luro con Liniers, y en la permanente evocación del "Viejo Fortín" como símbolo.
En diálogo exclusivo con Télam, "Pistola" añadió: "La propuesta de nuestro agrupamiento 'Círculo El Fortín', un movimiento de socios que tiene más de medio siglo, apuntó a dos campeonatos: institucional y deportivo".
"Las obras del estadio José Amalfitani y el Polideportivo son datos del crecimiento. Vélez tiene más de 50 mil socios", apuntó.
Asimismo, elogió al mítico "don Pepe" José Amalfitani, explicó Gámez, ex presidente dos veces: 1996/99 y 2002/05.
"`Don Pepe`, con 25 años, ya estaba integrando comisiones en el club. Un gigante", enfatizó el ex dirigente velezano.
En tanto, destacó a otros directivos como Ricardo Petracca, José Ramón Feijoó, Héctor Gaudio y muy especialmente a Guillermo Pizzoglio, con quien compartió el ciclo exitoso orientado por Carlos Bianchi, entre 1993 y 1997.
"Un grupo de jóvenes dirigentes se formaron en nuestra idea de `no hipotecar` a Vélez bajo la tentación de hacer compras de futbolistas, donde nunca se sabe cómo será al cabo el rendimiento. Por eso, apostamos a las inferiores y formar, nosotros, a los futbolistas del club", puntualizó.
Por otra parte, reflexionó sobre la política austera del club y señaló que "el orgullo velezano es comprar poco y vender bien. Entre el Clausura 09 y este Inicial ganado por Vélez, el club vendió diez figuras que dieron gran rédito y no compró en cantidad. Apenas lo necesario. Eso sí: contamos con Christian Bassedas (manager de la institución) y el "Flaco" (Ricardo) Gareca (el DT), dos tipos muy inteligentes".
"Una de las enseñanzas que dejó `Pepe` (Amalfitani) era que no había que entusiasmarse con aquellos que llegan al club con gran condición económica y terminan siendo tiburones. En los 90 la ola de los privados quería hacer de los clubes sociedades anónimas, Vélez y Lanús hicieron frente a los gerenciadores", prosiguió.
Gámez apoyó también la gestión de Ricardo Gareca y muestra el orgullo velezano a la hora de la reseña: "De un club de barrio a estar entre los mejores clubes del mundo según el propio ránking de FIFA, sin perder de vista lo social y el campeonato económico, algo que no siempre gana el resto", se ufanó.
"¡Pensar que con Emilio Chebel, ex presidente de Lanús, y algunos dirigentes de AFA en los 90 nos opusimos a la ofensiva de (Mauricio) Macri, de Boca, por la ola de privatizaciones que empujó el gobierno de Carlos Menem, recordó. (Télam)