Los comerciantes esperan tener un día tranquilo. A las 9 abrirán las puertas de sus negocios y aguardarán ansiosos la llegada de los compradores que les permitan recuperar las pérdidas de venta que sufrieron por los desmanes ocurridos el sábado en la capital.
Atenderán en horario corrido y está previsto que bajen las persianas a las 18. Sin actividad bancaria por ser un día no laborable y con el servicio público de pasajeros que funcionará hasta las 20.30, la previa a la Nochebuena se presenta como la esperanza de repuntar ganancias.
Este horario de atención al público es usual en otras provincias para esta época del año. Sin embargo en Tucumán surgió una discusión porque, según el gremio de los trabajadores del comercio, los empresarios no cumplían con el pago de las horas extras como estaba acordado. Por esto, la semana anterior se había resuelto que los comercios abrieran sólo el mediodía durante la jornada de ayer y que hoy atendieran hasta las 15. Pero ahora todo cambió.
"Estamos muy conformes con el acuerdo al que se llegó entre el Gobierno y los comerciantes para extender por tres horas más la jornada laboral del 24. Decidimos sumarnos a esta medida porque entendemos que los empresarios podrán recuperar lo que no vendieron en el tiempo que estuvieron sin trabajar por culpa de lo que pasó el sábado", explicó Oscar Cano secretario administrativo de la Sociedad de Empleados y Obreros de Comercio (SEOC).
Recuperación en la venta
Los representantes del sector comercial en Tucumán coincidieron al decir que ayer se trabajó normalmente y que - en cuestiones de venta- fue una jornada que dejó buenos réditos. "Fue un día bastante interesante. Y optamos por no abrir por la tarde porque entre la gente todavía hay un estado de shock. Mañana (por hoy) será muy importante para la actividad", señaló Raúl Fioretti, titular de la cámara de comercio de San Miguel de Tucumán.
A su vez explicó que en la cámara empresarial no recibieron denuncias de comerciantes que hayan sido saqueados durante los desmanes del sábado, e indicó que los principales afectados fueron los feriantes. Por otra parte, remarcó que el gobierno deberá revisar detenidamente todo lo que ocurrió. "Fue una situación atípica y las autoridades deberán analizar para buscar el origen de lo que sucedió", dijo.
El presidente de la Federación Económica de Tucumán (FET), Raúl Robín, también subrayó que la actividad comercial no estuvo en el nivel que se esperaba pero que, no obstante, aún fue buena. "Veníamos con una muy buena performance que decayó en el punto donde se esperaba la mayor venta. Esperamos que esta situación se restituya y que mañana (por hoy) la gente vuelva a salir al microcentro", explicó.
En este contexto, Robín consideró que los ataques del sábado estuvieron coordinados desde algún sector. "Pienso que este no fue un hecho aislado. Era un grupo chico pero que contaban con logística y estrategias que no coinciden con el accionar de un grupo improvisado. Estaban organizados y los grupos que atacaron en El Bajo no eran los mismos que estuvieron en el centro. Sin embargo no lograron tener el acompañamiento que esperaban", concluyó.