CONCEPCIÓN.- Un nuevo enfrentamiento entre el intendente, Osvaldo Morelli, y el presidente del Concejo Deliberante, Mario Carrier, profundizó la pelea entre el departamento Ejecutivo y el organismo legisferante. El jueves, Carrier ordenó que no recibieran en mesa de entrada del Concejo el veto que había dispuesto Morelli para una ordenanza que disponía que se le pusiera el nombre de Papa Francisco a la primera cuadra de la calle Nasif Estéfano.
"No se lo recibió (al veto) porque no se ajustó a los términos legales. El veto es un procedimiento con habilitación de día y hora. En este caso, tendría que haber ingresado el documento el jueves hasta las 10. Sin embargo se lo presentó cerca de las 10.30", explicó Carrier. Según el concejal, el Departamento Ejecutivo del municipio tuvo ocho días de plazo para presentar el veto. "Hay reglas que las tiene que respetar", remarcó.
Ante los argumentos legales expuestos por Carrier, los miembros de la intendencia no ocultaron su enojo. "Al llegar a la secretaría del Concejo nos sorprendió la novedad de que el veto no iba a ser recibido porque la presentación era extemporánea", dijo el secretario de Gobierno, Carlos Di Sántolo. "No hubo forma de hacer entender que la normativa establece que se debe presentar en el horario administrativo. Es decir de 7 a 13", agregó.
Morelli tildó de "inadmisible y antojadiza" la actitud de Carrier, que había sido funcionario en su anterior gestión al frente del municipio. Según el intendente, esta actitud genera un grave conflicto institucional, sin precedentes, que la intendencia está dispuesta a judicializar.
"Denunciaremos este hecho para que la Justicia intervenga ante esta clara violación de garantías constitucionales; el Concejo es de la comunidad, no de Carrier", fustigó. Además, el intendente dijo que el veto tenía que ser recibido, más allá de que los ediles puedan estar a favor o en contra de la medida.
En la calle que avivó la interna está ubicada la Catedral de la ciudad. Y, según el concejal de la UCR Eduardo Carrizo, el obispo José María Rossi estaba conforme con el cambio de denominación de esa cuadra. En este contexto, insistió en que Morelli tiene "actitudes despóticas" al desoír al Concejo.
Según el jefe comunal, esta ordenanza cumplirá con la voluntad de homenajear al Papa pero provocará un desorden urbanístico en esa parte de la ciudad. Morelli argumentó que el eventual cambio de nombre de la primera cuadra de la calle Nasif Estéfano provocaría desconcierto, porque esa arteria ya iba a tener tres nombres distintos en toda su extensión.
La posible judicialización de esta interna política podría llegar a provocar una profunda fractura entre las autoridades del Ejecutivo y del Concejo. (C)