13 Octubre 2023
Tener jueces y poder resolver los problemas que plantean los ciudadanos es fundamental en una sociedad donde se respeten los derechos. Tucumán está con serios problemas de coberturas. Hay más de 100 puestos que no tienen titular y eso, sin dudas, redunda en la atención de Justicia.
El pedido de los jueces del fuero de Familia fue lo que terminó de apurar a la búsqueda de una solución. Los magistrados plantearon el tiempo que llevan con subrogancias, la cantidad de casos que reciben y la falta de tiempo para resolver acorde con la sensibilidad de los temas que tratan. Se trata de causas que en su mayoría tienen que ver con filiaciones, pago de pensiones, y trámites de parejas. A esto se sumaron sendas notas del Colegio de Abogados, dirigidas tanto el gobernador Juan Manzur como al presidente de la Corte, Daniel Leiva. Allí se planteó que la Justicia está viviendo una crisis institucional justamente por la falta de cobertura de vacantes. Según los propios registros del Poder Judicial, hay más de 120 vacantes, en fueron tan sensibles como los de Familia, Trabajo, Contencioso Administrativo y, por supuesto, Penal. Pero no se cubren. La decisión de la Legislatura de eliminar los juzgados de primera instancia del fuero Contencioso Administrativo -aún vacantes, pero concursados- tampoco cayó bien, teniendo en cuenta la acumulación de trabajo en un área eminentemente relacionada con la política.
El Gobernador tiene desde hace más de un año 34 ternas a su disposición. El CAM; con reuniones semanales, toma examen a los postulantes y termina los procesos elevando los nombres al Poder Ejecutivo, pero este no envía los pliegos a la Legislatura.
Ya pasaron 11 meses desde la última vez que se dio una jura de jueces en Tucumán: fue el 3 de noviembre del año pasado, cuando asumieron 10 magistrados. Y la última vez que la Legislatura trató pliegos fue el 26 de octubre del año pasado.
Luego del pedido de los magistrados y de las notas del Colegio de Abogados hubo charlas entre la Corte y el Ejecutivo y se decidió tratar de dar alguna solución. Y se recurrió a la figura de la subrogación. Se propusieron dos nombres para cubrir dos de los juzgados de Familia, pero con jueces interinos, y no permanentes. En consecuencia, la próxima sesión de la Legislatura promete ser clave para tratar de resolver una parte de este problema. En principio habría consenso para tratar esas postulaciones y cubrir los cargos. Pero la resolución está lejos de ser efectiva.
La designación de jueces tiene una enorme carga política. Más allá del trabajo del Consejo Asesor de la Magistratura, que analiza antecedentes y toma los exámenes, elevando cinco nombres en cada terna, está en manos del gobernador elegir entre cada uno de ellos y mandar el pliego a la Legislatura. La ley no le impone plazos al gobernador. Creemos que sería bueno que cuanto antes se normalice la situación en el Poder Judicial, algo que beneficiará a los ciudadanos.
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