Tránsito: Aetat propone al municipio que se destinen calles exclusivas para colectivos

Los empresarios se expresaron en desacuerdo con la implementación de un único carril para ómnibus. Alternativas.

ARCHIVO ARCHIVO

La Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) elevó una nota en respuesta a la Municipalidad de San Miguel de Tucumán para expresar su formal rechazo a la idea de los carriles exclusivos para ómnibus, enmarcada en el plan para el reordenamiento del tránsito urbano que impulsan en la sede de 9 de Julio y Lavalle.

En el texto -firmado por una treintena de empresarios ante la consulta del secretario de Movilidad Urbana, Benjamín Nieva- se propone la implementación de un sistema de calles exclusivas para el transporte público, destinando “arterias centrales de la ciudad” para la circulación de colectivos. “En el caso específico, serían (determinados tramos de) las calles Santiago del Estero o Córdoba; Salta-Jujuy; General Paz o San Lorenzo (luego del cambio de sentido) y Monteagudo-Entre Ríos”, consignaron en Aetat.

Los titulares de las líneas que recorren la Capital incluyeron un “paso intermedio” como opción previa a la aplicación de su propuesta, consistente en la demarcación de dos carriles únicamente para ómnibus, “sin excepciones de ningún tipo para los automóviles particulares o de servicios públicos, incluyendo taxis, Uber, vehículos de repartos, etcétera”, aunque contemplando “una limitada consideración para ambulancias o urgencias”.

“Estas dos alternativas, consideramos, son las únicas válidas y con posibilidades de éxito; y lo demuestran los logros alcanzados en las principales ciudades del mundo”, aseguraron los empresarios.

A su vez, apuntaron cuatro razones por las cuales, según su criterio, este modelo sería el adecuado para mejorar el tránsito en San Miguel de Tucumán.

El primero sería que “beneficia a los usuarios” de un servicio masivo, ya que cada unidad “transporta a un promedio de 20 personas, que pueden ser entre 40 y 60 en un horario pico”, mientras que “un automóvil particular traslada 1,5 personas en promedio”. “Se necesitan entre 25 y 30 vehículos para cubrir las prestaciones del colectivo”, describieron.

En segundo lugar, aludieron a la “menor contaminación” y la reducción del impacto ambiental, sonoro y de estrés que genera el tránsito.

Luego se refirieron a la “mejor utilización de los tiempos para toda la población”, dado que, con el esquema de calles exclusivas, “se evitarían los congestionamientos en las arterias involucradas”. En ese sentido, aseguraron que también “se desalienta el uso del auto particular”.

El cuarto motivo que mencionaron en Aetat para fundamentar su propuesta apunta a “descongestionar el casco viejo de la ciudad, que ya desde hace muchísimo tiempo ha dejado de ser apto para tantos vehículos”. Con esto, en paralelo, se logrará “un alivio para el desplazamiento de peatones en el sector comercial”, aseguraron los empresarios.

Descongestionar el tráfico

A fines de marzo, la Municipalidad dio inicio a los trabajos de demarcación de los carriles exclusivos por donde circularán los ómnibus urbanos e interurbanos. Se trata de la primera etapa del Plan Integral de Movilidad Urbana (PIMU) destinado a mejorar la circulación en la capital.

“Queremos descongestionar el tránsito dentro del microcentro y mejorar la prestación del servicio de transporte. Tenemos un tránsito colapsado en el área del microcentro por la presencia de autos particulares, especialmente en las horas pico, por lo que hay que pensar en solucionar esta situación, pensando en la ciudad que queremos a futuro”, dijo Nieva tras la puesta en marcha de este programa. Además, detalló que, una vez finalizada la etapa de demarcación y señalización, “los ómnibus van a circular por la vía derecha y compartirán las arterias con los autos particulares, que lo harán por el carril izquierdo”.

Pese a los avances de cara a la implementación de este sistema, la Intendencia a cargo de Rossana Chahla incluyó una rueda de consulta con los titulares de las empresas de colectivos para conocer su opinión. Y en Aetat dejaron en claro su desacuerdo con esta modalidad. “Nos permitimos disentir con el criterio del municipio, que muestra una faceta inesperada, con independencia del sentir de la gente y alejada de toda lógica urbanística y de movilidad que se aplica mundialmente”, indicaron en la entidad presidida por Daniel Orell.

Entre otros argumentos, sostuvieron que el plan impulsado desde 9 de Julio y Lavalle implica un “trato desconsiderado y discriminatorio hacia el usuario”, tanto en el caso de quienes residen en la Capital como de quienes llegan desde el interior. “Esta medida le costará al municipio críticas de todo tipo y origen. Ya nos hacen llegar llegar opiniones contrarias (al plan de carriles exclusivos) autoridades de distintas localidades preocupadas por sus vecinos”, añadieron en Aetat.

Además, sostuvieron que el proyecto del municipio “es contrario a todos los criterios razonables de urbanidad y diagramación de servicios adoptados en el mundo moderno”. Según advirtieron, su aplicación “afectará sobremanera a muchas empresas, que verán profundizada sus ya críticas economías y que irremediablemente dejarán de existir, con el consiguiente perjuicio para los usuarios y los empleados del sector”.

“En el mundo moderno se da preferencia al transporte público con calles exclusivas y de rápida circulación. Recorridos ágiles y simples. Aquí y con este plan, en cambio, se perjudica al ciudadano común y a las empresas, dejando todo el sector central de la ciudad para autos particulares y transportes ilegales, que podrán darse el gusto de congestionar y estacionar sus vehículos en plena plaza Independencia y no se habrá solucionado absolutamente nada”, insistieron en la entidad empresaria.

Más allá de las críticas, en Aetat valoraron la postura de la Intendencia de “buscar un cambio que busque aliviar al menos el problema del tráfico en Tucumán”. “Pero pretendemos no se perjudique irremediablemente a los involucrados”, cerraron en su respuesta a la Capital.

Comentarios