Bella Vista, el destino elegido para el Día de la Lealtad

La necesidad de mostrar un partido consolidado lleva a las autoridades del peronismo tucumano a buscar un lugar simbólico

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La necesidad de mostrar un partido consolidado lleva a las autoridades del peronismo tucumano a buscar un lugar simbólico para conmemorar el Día de la Lealtad, el 17 de este mes. Y no es un momento cualquiera. A nivel nacional, el Partido Justicialista se está debatiendo en una fuerte pelea por la conducción del movimiento. Cristina Fernández de Kirchner asoma como la contrincante más directa para pelear contra el gobernador riojano Ricardo Quintela por la presidencia de ese partido, el mes que viene. El principal ideólogo del resurgimiento de la ex vicepresidente es el actual senador Eduardo “Wado” de Pedro que, a su vez, ha trazado una línea divisoria con el bonaerense Axel Kicillof (aliado a Quintela) y que mantiene aceitados contactos con uno de los vicepresidentes nacionales del PJ, el senador por Tucumán, Juan Manzur. Precisamente, el ex mandatario provincial se ha tomado un respiro en la puja de poder y, por ahora, no asoma como protagonista visible en este proceso de reacomodamiento peronista.  

Usualmente, cada 17 de octubre, Manzur se encargaba de traer a los principales referentes del movimiento a encuentros plurisectoriales en territorio tucumano, en tiempos de Alberto Fernández como presidente de la Nación. La historia ha cambiado desde que el peronismo sucumbió en las urnas ante La Libertad Avanza, hace casi un año. A tal punto que los libertarios se animan a ver si conquistan territorios afines al peronismo, mirando hacia 2025, como pasa hoy en Santiago del Estero, donde la secretaria general de la Presidencia Karina Milei y el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, desembarcaron para sumar voluntades en territorio de Gerardo Zamora. 

La convocatoria al acto en Tucumán lo hará el distrito local del PJ. Entre los principales oradores estarán el gobernador Osvaldo Jaldo y el vicegobernador Miguel Acevedo. Todavía no se sabe qué hará el presidente del PJ local, Manzur. Lo simbólico del acto está dado porque Bella Vista es la ciudad donde nacieron dos de los históricos referentes partidarios y ex gobernadores: José Pedro Fernando Riera y Amado Nicomedes Juri. El mensaje tiene un doble significado. Puertas adentro, una amplia convocatoria será una demostración de apoyo a la gestión provincial que, el año que viene, tendrá su primer test electoral. Hacia afuera, los organizadores creen que, con una concurrencia estimada en unos 20.000 simpatizantes de toda la provincia, el PJ puede marcar la cancha ante la ola libertaria que se viene en todo el país y que pasa muy cerca, del otro lado de la frontera interprovincial. Pero hay una tercera lectura: la necesidad de “alambrar Tucumán”. ¿Qué significa? Mostrar a las autoridades nacionales partidarias que, independientemente de lo que suceda en la mesa nacional, en la provincia la unidad se consolida. Por de pronto, en el PJ están preparando un documento en tal sentido que, además, explicará los motivos por lo que Bella Vista volverá a teñirse de peronismo, independientemente que su intendenta, Ana Paula Quiles, sea de extracción radical. 

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