15 Mayo 2025
A la hora de decidir cómo alimentar a las mascotas, muchos dueños optan por el alimento balanceado comercial o, en su defecto, por pollo hervido. Sin embargo, estas opciones no siempre resultan completas desde un punto de vista estrictamente nutricional. Aunque son prácticas y accesibles, pueden no cubrir todos los requerimientos esenciales. Por eso, es clave evaluar otras alternativas que respondan mejor a las necesidades específicas del animal.
Los veterinarios y especialistas en nutrición animal recomiendan establecer una dieta sostenida y personalizada. Esta debe contemplar factores fundamentales como la edad, el tamaño y el nivel de actividad del perro. Ajustar la alimentación según estas variables permite garantizar un desarrollo saludable y una mejor calidad de vida. Una dieta adecuada no solo previene enfermedades, sino que también contribuye al bienestar general de la mascota.
Cuál es la dieta que se recomienda para la mascota
Una de las alternativas más recomendadas actualmente es la dieta BARF, cuyas siglas en inglés significan "Biologically Appropriate Raw Food" (Alimentación Cruda Biológicamente Apropiada). Esta dieta se basa en el consumo de alimentos crudos como carne, huesos carnosos, frutas, verduras frescas y algunos suplementos específicos. Su objetivo principal es imitar lo que un perro consumiría en estado salvaje, aportando nutrientes esenciales para su organismo.
La premisa central de este enfoque es ofrecer una alimentación lo más natural posible, que favorezca la salud digestiva, fortalezca el sistema inmunológico, mejore la dentadura y potencie el brillo del pelaje. Sin embargo, es fundamental que este tipo de alimentación esté supervisada por un veterinario especializado en nutrición animal. Una guía profesional permite evitar desequilibrios, como deficiencias o excesos de ciertos nutrientes, que podrían comprometer la salud del animal.
Entre las principales críticas al alimento balanceado comercial, se señala su composición con aditivos, conservantes y subproductos de baja calidad. Aunque estos productos están formulados para cubrir las necesidades mínimas, no siempre garantizan una nutrición óptima. Además, su consumo prolongado puede estar relacionado con alergias, problemas digestivos y deterioro del estado general del perro.
Tampoco se recomienda alimentar exclusivamente con pollo hervido, ya que este tipo de dieta resulta pobre en nutrientes clave como calcio, zinc, hierro u omega-3. Una alimentación monótona puede derivar en carencias severas a largo plazo, afectando el desarrollo y la energía del animal. La clave está en ofrecer un menú variado, que combine diferentes fuentes de proteínas, grasas saludables y carbohidratos naturales para lograr un equilibrio nutricional completo.
Las recomendaciones esenciales para alimentar a un perro de edad avanzada
-Priorizar alimentos naturales y altos en proteínas, como pollo y pescados blancos.
-Incluir verduras y frutas seguras en su dieta.
-Evitar procesados con conservantes y colorantes.
-Optar por alimentos suaves y digeribles para facilitar la masticación y digestión.
-Incorporar comida húmeda, como caldos sin sal ni grasas, para hidratar a tu perro.
-Añadir suplementos de Omega 3
-Supervisar la cantidad de suplementos administrados.
-Mantener paseos regulares adaptados a sus capacidades físicas.
-Realizar chequeos veterinarios frecuentes para monitorear su salud.
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