El pan que más proteínas aporta.
Probablemente cuando pensamos en un alimento rico en proteínas, lo último que se nos vendría a la cabeza sería el pan, entre medio de los quesos, las carnes y los yogures. Pero este alimento tan consumido en el mundo también puede aportar macronutrientes y así potenciar aún más tu dieta alta en este grupo de aminoácidos.
Aunque parezca una sorpresa, podemos encontrar pan alto en proteínas en los supermercados. Pero ¿qué es en realidad este producto? Si el paquete de este alimento anuncia que su contenido es alto en proteínas, a menudo implica que el pan fue enriquecido o fortificado con gluten de trigo, harina de soya, semillas o proteína de guisante, explica Amy Brownstein, MS, RDN, dietista registrada de MyNetDiary, al medio Prevention.com.
Los beneficios de un pan rico en proteínas
El procedimiento de enriquecimiento aumenta el contenido de proteína de 5 a 12 gramos por rebanada, en comparación con los dos a cuatro gramos que suele contener el pan blanco o de trigo común, añade Tara Schmidt, RD, dietista principal de Mayo Clinic Diet. Aun así, es importante prestar mucha atención a las etiquetas nutricionales, ya que algunos panes requieren dos rebanadas para cumplir con sus afirmaciones de alto contenido proteico.
Si te cuesta incorporar suficiente proteína a tus comidas, podrías beneficiarte de complementar tu tostada matutina con un pan enriquecido. La ingesta diaria recomendada (IDR) internacional de proteína es de 0,8 gramos por kilogramo de peso corporal, lo que equivale a unos 54 gramos al día para una persona que pesa 70 kilos, explica Brownstein.
Cómo comer el pan rico en proteínas
El pan proteico se puede consumir con los mismos productos con los que tomarías cualquier pan, pero para resaltar sus propiedades es aconsejable acompañarlo de vegetales o de otras proteínas bajas en grasas. En el desayuno, por ejemplo, es ideal con tomate o aguacate, e incluso con alguna mermelada sin azúcar. Mientras que en la cena es perfecto como base de champiñones o espárragos, o bien acompañando ensaladas, queso fresco, huevos, carnes magras o pescados, indican desde Men's Health. En ese artículo señalan cuál es ese pan que aportará las proteínas necesarias.
El pan de trigo sarraceno, el aporte de proteínas necesario
Se le conoce como el pan de las dos mentiras porque ni es de trigo ni su origen es sarraceno, pero todo eso nos da igual. Se trata de uno de los mejores panes que podemos encontrar, elaborado con una planta herbácea más conocida como alforfón, tan antigua como las llanuras de Asia Central, de donde proviene. Nutricionalmente es impecable: cuenta con una elevada carga proteica que lo hace ideal para deportistas, no contiene gluten, es rico en hierro y magnesio, tiene cantidades muy interesantes de Omega-3 y Omega-6 y, además, controla los niveles de azúcar y regula nuestro colesterol.
Es un pan que no contiene gluten y, por tanto, es apto para celíacos. Su alto contenido en proteínas biodisponibles lo hace perfecto para todo tipo de dietas, incluidas las veganas y vegetarianas. Además, es muy digestivo y aguanta mucho tiempo fuera una vez horneado, pudiendo estar al aire libre algo más de una semana sin perder su textura, aunque no soporta temperaturas demasiado altas.























