Video: Inoue batalló para derrotar y no dejar dudas ante Akhmadaliev
Naoya Inoue volvió a ratificar su supremacía en el boxeo mundial tras una sólida victoria sobre el uzbeko Murodjon Akhmadaliev en el IG Arena de Nagoya. El púgil japonés, campeón indiscutido del peso supergallo, defendió con éxito los cinturones de la WBC, WBA, WBO e IBF, imponiéndose por decisión unánime en un combate que confirmó su condición de referente absoluto de la categoría.
Las tarjetas reflejaron con claridad el dominio de Inoue: 117-111, 118-110 y 118-110. Fue su quinta defensa exitosa de los cuatro títulos de las 122 libras, en un choque que se anticipaba más equilibrado debido a la fortaleza de Akhmadaliev. Incluso el promotor Eddie Hearn había sugerido que el japonés podía verse comprometido ante el poder del uzbeko. Sin embargo, desde la primera campana, Inoue dejó claro que la diferencia técnica y física era demasiado amplia.
El invicto nipón impuso velocidad de manos y pies, cerrando los caminos de su rival y castigándolo con combinaciones certeras. Akhmadaliev, campeón interino de la AMB, buscó imponer su pegada, pero sus intentos resultaron insuficientes. Solo en los últimos asaltos conectó algunos golpes de consideración, aunque sin alterar el curso de la pelea.
Aun en derrota, Akhmadaliev logró un mérito particular: convertirse en el primer boxeador desde 2019 que logra completar los doce rounds ante Inoue. El último había sido Nonito Donaire, interrumpiendo en esta ocasión una racha de 11 victorias consecutivas por nocaut. “Quiero dar una actuación digna de un campeón libra por libra”, expresó Inoue tras el combate, en declaraciones recogidas por The Ring.
El ambiente en Nagoya acompañó la magnitud del evento: 17.000 espectadores presenciaron el regreso de Inoue a Japón después de su última defensa en Las Vegas, donde noqueó a Ramón Cárdenas. Aquella pelea le dejó una enseñanza que aún resuena: “Me pregunté una y otra vez por qué me habían derribado dos veces, y sé la respuesta. Es precisamente por haber tenido esa experiencia que puedo convertirla en una ventaja en esta pelea”, reflexionó el “Monstruo”.
Con esta nueva victoria, Inoue elevó su récord a 31 triunfos, 27 de ellos por la vía rápida, desde su debut profesional en 2012. Solo tres rivales —Ryoichi Taguchi, David Carmona y Donaire— habían resistido los doce asaltos ante él. Su dominio lo coloca por encima de figuras como Saúl Canelo Álvarez en número de defensas unificadas.
De cara al futuro, las expectativas crecen. En diciembre está programada su próxima presentación en Arabia Saudí, donde se perfila un enfrentamiento contra el mexicano Alan David Picasso. Además, ya lanzó un desafío directo a su compatriota Junto Nakatani: “En primavera en el Tokyo Dome”, proclamó desde el ring, mientras el campeón japonés aceptaba el reto desde la primera fila.
A sus 32 años, Inoue acumula títulos en cuatro divisiones y continúa escribiendo páginas doradas en la historia del boxeo, con un legado que parece aún lejos de alcanzar su punto final.























