ORNELLA CALVETE. Renunció a su cargo en Economía luego de que en su casa hallaran 700.000 dólares.
Una nueva jornada de indagatorias sacudió la esfera judicial en la causa que investiga el supuesto desvío de fondos y direccionamiento de compras en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis). Ayer, la principal novedad estuvo marcada por la negativa a declarar de Miguel Ángel Calvete, empresario señalado como pieza central del entramado.
Calvete, vinculado a droguerías y proveedoras de insumos, se presentó ante el fiscal Franco Picardi y el juez Sebastián Casanello en los tribunales de Comodoro Py, pero optó por el silencio, siguiendo la estrategia adoptada días atrás por otro de los acusados centrales, el médico Pablo Atchabahian.
El empresario está señalado por la fiscalía como uno de los presuntos “operadores externos” y nexos extraoficiales encargados de conectar a la agencia con las distintas firmas de medicamentos e insumos implicadas en las maniobras investigadas.
Su llegada a Comodoro Py se produjo en medio de un inusual operativo, ya que Calvete se encuentra detenido en la Comuna 4 por un proceso penal anterior, donde en 2019 fue hallado culpable por explotación económica del ejercicio de la prostitución ajena.
La diligencia judicial duró apenas media hora. Se le leyó la imputación que lo señala como coautor de los delitos, pero Calvete ejerció su derecho a no testificar. Tras el breve acto, fue inmediatamente trasladado de vuelta a su lugar de detención.
En un desarrollo simultáneo que pone de manifiesto la presión judicial, su hija, Ornella Calvete, renunció ayer a su cargo como directora en una secretaría dentro del Ministerio de Economía, un puesto que ocupaba hasta hace horas.
El rol de Miguel Ángel Calvete era, según el dictamen fiscal, el de una suerte de “director para-estatal” del organismo. Sin ser funcionario, se lo acusa de impartir órdenes directas a personal clave de la Andis, como Lorena Di Giorno y Eduardo Nelio González.
La acusación fiscal lo ubica como el principal conector entre la Andis y el circuito de droguerías, teniendo la capacidad de direccionar las compulsas de precios a favor de determinadas empresas en el marco del área de Prestaciones de Alto Costo y Baja Incidencia (Pacbi).
El peso de la prueba recae también sobre el secuestro millonario efectuado durante los allanamientos. En un domicilio a nombre de su empresa, Indecom SRL -que además era la casa de su hija Ornella-, la Justicia encontró y secuestró cerca de US$ 700.000 en efectivo.
Mediante un escrito presentado ante el juzgado, Calvete solicitó la “urgente” devolución de la suma incautada, argumentando ser el principal titular del capital social de Indecom y, por lo tanto, el damnificado principal por el secuestro.
Parte de las evidencias más sensibles provienen de los chats incautados. En septiembre, Ornella Calvete le expresó a su padre su preocupación por la presencia policial en su edificio y le preguntó si la empresa tenía “cash blanco” (dinero legal) ante un posible allanamiento.
Otro chat revela el alcance de los negocios que se manejaban. Ornella consultó a su padre por una reunión con un tal “Claudio” de una ortopedia alemana y, al desearle suerte, le prometió: “si todo sale bien le compro una lambo [Lamborghini], una granja, lo que quieras”.
Además, en otra tanda de mensajes recuperados, Calvete habla con la funcionaria Lorena Di Giorno el día de los allanamientos, a quien se le escucha decir que ya estaba “borrando todo”, una clara referencia a la destrucción de evidencia.
Por otro lado, se reconfirmó que el médico Pablo Atchabahian, también detenido con prisión domiciliaria, se negó a declarar. Atchabahian está acusado de operar en la sombra, llegando a ordenar que se frenara un pago a una droguería específica por “estar jugando mal”. Su influencia llegaba hasta el número dos de la Andis, Daniel Garbellini.
Sospechas
Los llamativos movimientos en la casa de Calvete se produjeron poco después de un intercambio de mensajes de audio entre ambos, en el que Calvete dijo: “Coroa, escuchame, bueno, hablas con (Julio) Play y mañana a primera hora te lo manda a donde le digas o mandale un fercho, ponen algún lugar disimulado, eso que me habías dicho, por un lado”. El término “Coroa” sería un apodo para Spagnuolo, de acuerdo al expediente.
Además se registraron al menos cinco visitas de Calvete a la residencia de Spagnuolo en un country bonaerense, entre junio de 2024 y mayo de 2025. En uno de los chats el empresario mencionó a su pareja, Guadalupe Ariana Muñoz, a la que le pidió fondos para “subir” el dinero al ex funcionario, en alusión a un “boludo del pelado que viaja a Israel y no tiene efectivo en pesos”. El “pelado” sería el presidente Javier Milei, que hizo un viaje oficial a ese país en ese período.
La hora de Spagnuolo
En el marco de la investigación, que calcula contratos con sobreprecios por más de $43.000 millones entre julio de 2024 y agosto de 2025, la Justicia tiene citado para hoy, a partir de las 13:30 al ex director de la Andis, Diego Spagnuolo, la máxima autoridad del organismo durante el período investigado, sumándose a las 15 personas que deberán presentarse a declarar.
























