"No es malo adherir a un partido político"

Para el centro de estudiantes de la ESEA, recibir ayuda partidaria no implica condicionamiento

ESEA. Rocío, Rodrigo y Luz , a favor de usar la camiseta de un partido político. LA GACETA / FOTO DE ENRIQUE GALINDEZ ESEA. Rocío, Rodrigo y Luz , a favor de usar la camiseta de un partido político. LA GACETA / FOTO DE ENRIQUE GALINDEZ
04 Noviembre 2012
Apoyan a rajatabla que haya una ley que obligue a las escuelas a que tengan centros de estudiantes; aseguran que en las mayoría de establecimientos educativos públicos de nivel secundario, los directivos ven a la organización de los alumnos, "como un espacio de poder al cual le temen". Adhieren a los proyectos presentados en la Legislatura que habilitan a los partidos políticos a participar dentro de las escuelas, no sólo con sus propuestas sino también ayudando a los centros estudiantiles con sus finanzas, a fin de que puedan llevara cabo las actividades programadas. "No tiene nada de malo, a que haya un centro estudiantil que adhiera a una agrupación política", opinó Rodrigo Medina (17), presidente del Centro de Estudiantes de la Escuela Secundaria de Educación Artística (ESEA). Al igual que opinan sus compañeras Rocío Anastasio (vice), y Luz Lucero (16), Rodrigo dijo que no tiene nada de malo adherir a una agrupación política. "Nuestras luchas adentro de la escuela no llevan banderas partidarias, sino aquellas que son de interés de los estudiantes, más allá de nuestra ideología política", añadió Rocío.

Los chicos defendieron la idea plasmada dentro de uno de los proyectos oficialistas que incluye la posibilidad de que los centros de estudiantes puedan recibir ayuda financiera de los partidos políticos. "Siempre hubo agrupaciones identificadas por el partido al que pertenecían sus miembros, como Franja Morada (FM) o el Humanista (PH)", indicó Rodrigo. El y sus compañeros militan desde hace unas semanas, en la agrupación de La Cámpora y dijeron que no mezclan las cosas cuando se trata de representar los intereses de los estudiantes y de su escuela.

"Cada alumno tiene su propia idea política y no está entre nuestros objetivos que todos piensen como nosotros", indicó Rocío, para quien militancia es igual a "compromiso" y a "responsabilidad".

Los alumnos dijeron que cuando blanquearon su adhesión a La Cámpora, algunos directivos de la ESEA, les hicieron problemas, como cuando vistieron la remera con el logo camporista. "Sin embargo, dejan pegar afiches a otras agrupaciones", denunciaron.

Los miembros del centro de estudiantes son elegidos en una asamblea de delegados. Los delegados son elegidos por curso, a mano alzada. Explicaron que antes hubo pruebas piloto respecto a la mecánica de la elección; por lista, por ejemplo, como se hace en la Universidad, pero no resultó,

"La función del centro es representar los intereses y los derechos de los estudiantes, no hay cosas extrañas", agregó Luz.

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