27 Mayo 2013
El hombre aprovechaba que su esposa no estaba y manoseaba a su hija, desde que tenía seis años. Cuando la niña cumplió 13 comenzó a violarla. La adolescente soportó los abusos durante un año más, hasta que se animó a contárselo a su madre. A pesar de las amenazas de su marido, la mujer lo denunció. El viernes la Justicia detuvo al presunto abusador.
La denuncia fue realizada el 30 de octubre del año pasado. Fuentes de la investigación comentaron que la madre de la adolescente llegó hasta la comisaría de Lules, ciudad en la que reside con su familia, y les contó que su hija le había confesado que su padre la violaba.
Nueve días más tarde, la madre ratificó la denuncia en la fiscalía de Instrucción de la I° Nominación, a cargo de Mariana Rivadeneira. Luego la adolescente declaró ante la fiscala y le contó que su padre había comenzado a tocarla en distintas partes del cuerpo desde que tenía seis años.
Los abusos ocurrían cuando el hombre se quedaba sólo con su hija, y hace un año había comenzado a violarla, de acuerdo a la declaración de la adolescente. Los peritos del Cuerpo Médico Forense confirmaron que en el cuerpo de la menor había signos de abuso sexual.
El presunto abusador, que tiene 38 años, tiene otros cuatro hijos con la mujer, que son menores de edad. La madre de la adolescente le contó a Rivadeneira que cuando supo de los abusos, su esposo la había amenazado. Le dijo que si él iba preso, cuando saliera de la cárcel la buscaría para matarla.
Seis meses después
La respuesta de la Justicia llegó varios meses más tarde. El 7 de mayo de este año el juez de Instrucción de la I° Nominación, Alejandro Tomas, concedió una medida de protección de persona a favor de la menor y de su familia, para que su padre no pudiera acercarse.
Dos semanas más tarde (el viernes), el juez ordenó la detención luego de que la fiscala insistiera con la medida. Policías de la sección Seguridad Personal de la Dirección General de Investigaciones, a cargo del comisario Víctor Barraza, se dirigieron hasta Lules. El acusado no se encontraba en su casa. Esperaron a que volviera y lo detuvieron alrededor de las 20.
La denuncia fue realizada el 30 de octubre del año pasado. Fuentes de la investigación comentaron que la madre de la adolescente llegó hasta la comisaría de Lules, ciudad en la que reside con su familia, y les contó que su hija le había confesado que su padre la violaba.
Nueve días más tarde, la madre ratificó la denuncia en la fiscalía de Instrucción de la I° Nominación, a cargo de Mariana Rivadeneira. Luego la adolescente declaró ante la fiscala y le contó que su padre había comenzado a tocarla en distintas partes del cuerpo desde que tenía seis años.
Los abusos ocurrían cuando el hombre se quedaba sólo con su hija, y hace un año había comenzado a violarla, de acuerdo a la declaración de la adolescente. Los peritos del Cuerpo Médico Forense confirmaron que en el cuerpo de la menor había signos de abuso sexual.
El presunto abusador, que tiene 38 años, tiene otros cuatro hijos con la mujer, que son menores de edad. La madre de la adolescente le contó a Rivadeneira que cuando supo de los abusos, su esposo la había amenazado. Le dijo que si él iba preso, cuando saliera de la cárcel la buscaría para matarla.
Seis meses después
La respuesta de la Justicia llegó varios meses más tarde. El 7 de mayo de este año el juez de Instrucción de la I° Nominación, Alejandro Tomas, concedió una medida de protección de persona a favor de la menor y de su familia, para que su padre no pudiera acercarse.
Dos semanas más tarde (el viernes), el juez ordenó la detención luego de que la fiscala insistiera con la medida. Policías de la sección Seguridad Personal de la Dirección General de Investigaciones, a cargo del comisario Víctor Barraza, se dirigieron hasta Lules. El acusado no se encontraba en su casa. Esperaron a que volviera y lo detuvieron alrededor de las 20.
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