03 Agosto 2013
NOTICIA TRISTE. Todo el país se había solidarizado con la lucha de Renzo. CLARIN.COM
Renzo Salvatore Antonelli, el niño correntino de dos años que había sido sometido hace dos meses a un trasplante de corazón, murió ayer en el Hospital Garrahan.
El paciente había sido operado durante 14 horas entre la noche del sábado 1 y la tarde del 2 de junio, pero en los últimos días sufrió varios paros cardíacos hasta que finalmente falleció, según confirmaron fuentes sanitarias a la agencia de noticias DyN. Patricia Leguiza, abuela de Renzo, agradeció a la sociedad por el respaldo recibido en la lucha por salvarle la vida y remarcó que su nieto "abrió muchos corazones".
La mujer también llamó a tomar conciencia sobre la donación de órganos: "no hay que esperar a último momento a dar vida cuando no se puede hacer nada más".
"Cuando los chicos están esperando un trasplante, le pido a la gente que no pierda tiempo en decidir donar los órganos, porque en el caso de Renzo estuvo siete meses en espera. El cuerpo sufre", aseveró Leguiza. Indicó que Renzo tuvo un ACV y paros cardíacos, pero aclaró que el corazón que recibió en el trasplante "siempre estuvo firme". "Estamos todos de pie para seguir con fortaleza", subrayó.
El niño ya había sufrido el pasado 20 de julio un paro cardíaco que complicó su salud, aunque ese día los médicos lograron reanimarlo. Poco antes de su nacimiento, los médicos detectaron que sufría una miocardiopatía.
En noviembre pasado, el niño tuvo un accidente cerebro vascular (ACV) que le inhabilitó temporalmente la vista y el oído y le paralizó la mitad del cuerpo. La enfermedad cardíaca que padecía Renzo le impedía el desarrollo del miocardio, por lo que el músculo cardíaco no tenía fuerza para bombear sangre y oxigenar al resto del cuerpo. El trastorno había obligado a conectarle un corazón artificial en octubre de 2012. Los restos de Renzo serán inhumados en Corrientes, según dispuso su familia.
El paciente había sido operado durante 14 horas entre la noche del sábado 1 y la tarde del 2 de junio, pero en los últimos días sufrió varios paros cardíacos hasta que finalmente falleció, según confirmaron fuentes sanitarias a la agencia de noticias DyN. Patricia Leguiza, abuela de Renzo, agradeció a la sociedad por el respaldo recibido en la lucha por salvarle la vida y remarcó que su nieto "abrió muchos corazones".
La mujer también llamó a tomar conciencia sobre la donación de órganos: "no hay que esperar a último momento a dar vida cuando no se puede hacer nada más".
"Cuando los chicos están esperando un trasplante, le pido a la gente que no pierda tiempo en decidir donar los órganos, porque en el caso de Renzo estuvo siete meses en espera. El cuerpo sufre", aseveró Leguiza. Indicó que Renzo tuvo un ACV y paros cardíacos, pero aclaró que el corazón que recibió en el trasplante "siempre estuvo firme". "Estamos todos de pie para seguir con fortaleza", subrayó.
El niño ya había sufrido el pasado 20 de julio un paro cardíaco que complicó su salud, aunque ese día los médicos lograron reanimarlo. Poco antes de su nacimiento, los médicos detectaron que sufría una miocardiopatía.
En noviembre pasado, el niño tuvo un accidente cerebro vascular (ACV) que le inhabilitó temporalmente la vista y el oído y le paralizó la mitad del cuerpo. La enfermedad cardíaca que padecía Renzo le impedía el desarrollo del miocardio, por lo que el músculo cardíaco no tenía fuerza para bombear sangre y oxigenar al resto del cuerpo. El trastorno había obligado a conectarle un corazón artificial en octubre de 2012. Los restos de Renzo serán inhumados en Corrientes, según dispuso su familia.
Lo más popular