El Superior dirá si un grupo de interinos puede o no ser electo

Los integrantes del Consejo Superior de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) -constituidos en comisiones- no lograron acordar un único dictamen respecto de los derechos electorales de un grupo de docentes interinos. Se trata de aquellos educadores que renuncian expresamente a un cargo regular para que se los nombre como interinos en un cargo superior, que se crea con los puntos del cargo que deja el docente, más otros.

La reunión, que se realizó durante la mañana de ayer, era el cuarto intermedio de un encuentro solicitado por los miembros de la junta electoral de la UNT -la decana de Educación Física, Susana Villarruel (presidenta), su homólogo de Odontología, Daniel García, y Martín Mercado (vocales)-. Estos quieren determinar los derechos electorales de los docentes interinos, previo al armado de padrones para la elección del estamento, en el marco de la renovación total de autoridades en la UNT, que se desarrollará entre abril y mayo.

De allí salieron dos dictámenes, que serán debatidos por el Consejo Superior en la sesión extraordinaria que se realizaría el martes 11 del mes que viene. El primer dictamen concedía derechos electorales parciales a este grupo de interinos; es decir, sólo podrán elegir a sus representantes, del estamento en el que ostentaban el cargo regular. Esta opinión fue defendida, en especial, por la decana de Filosofía, Judith Casali de Babot, por la representante de los auxiliares de la docencia Adriana Liatto y por el consejero estudiantil por la segunda minoría, Víctor Amaya.

El segundo dictamen se inclinaba por conceder plenitud de derechos a los docentes interinos que se encuadren dentro de los márgenes señalados renglones arriba. Esto es, permitir que voten y que puedan resultar electos -siempre en el estamento en el que ostentaban el cargo regular- en la elección que, en el caso de los docentes, se realizará el 22 de abril. En este segundo caso se hace la salvedad de que, si el interino es elegido deberá optar entre representar en el Consejo Directivo de su facultad al estamento por el que resultó electo -para lo cual deberá renunciar al cargo de mayor jerarquía en el que fue nombrado en forma interina- o desistir de la consejería -en cuyo caso podrá mantener el cargo-. Si elige la primera opción -es decir, si asume- además de “volver” al cargo anterior, se suspenderá el concurso que se habrá llamado en el mismo momento en que este fue ascendido como interino.

Por este dictamen se inclinaban, entre otros, los decanos José Luis Vázquez (Derecho), Silvia González (Bioquímica), García (Odontología), Santiago Di Lullo (Económicas) y el consejero por los docentes adjuntos y asociados Sergio Mohamed.

El martes de la semana pasada, los consejeros y la junta habían acordado dos puntos: aclarar la resolución N° 2.421/2013, que da derechos de regulares a los docentes que, habiendo accedido a su cargo por concurso, devinieron interinos. Estos derechos se extienden hasta que se dé la evaluación o un nuevo concurso, con un plazo máximo de dos años. Se aclarará que, para los interinos que ya lleven más de dos años o más como tales, el plazo se contará desde el día en que empezó a regir la resolución: 25 de octubre pasado. También habían consensuado que el docente amparado por esa resolución que, sin renunciar, es designado interino en un cargo superior, de distinto estamento podrá votar y ser electo en el estamento en que había concursado. Pero precisaron que si resulta electo, el Consejo Directivo analizará si lo acepta como miembro o si le pide que opte entre integrar ese cuerpo por el estamento por el cual fue electo -en cuyo caso deberá renunciar al cargo superior- o mantener ese cargo y dimitir del Consejo.

Estos puntos, y el debatido ayer, serán votados por el pleno del Consejo Superior el 11 de marzo.