19 Junio 2014
Felipe asume la corona tras abrazar al viejo rey
En una ceremonia histórica y emotiva para España, quedó sancionada la norma que traslada la jefatura del Estado al heredero de la corona. La infanta Cristina, ausente Juan Carlos firmó la ley de abdicación y con ese acto allanó el camino para que su hijo sea proclamado hoy como nuevo monarca
TODO EMOCIÓN. Juan Carlos abraza a su hijo, tras la firma de la ley de abdicación. Sofía observa y Letizia aplaude. fotos de reuters
MADRID.- En un solemne e histórico acto, Juan Carlos de España sancionó la ley de abdicación que pone fin a sus 39 años de reinado y que desde la medianoche, convirtió en monarca a su hijo, Felipe de Borbón, allanando el camino para su proclamación, mañana en el Congreso. La emotiva ceremonia tuvo lugar en el Salón de las Columnas del Palacio Real, ante unos 160 invitados, entre ellos los integrantes del gobierno español, encabezado por el presidente Mariano Rajoy, las principales autoridades regionales, y los ex presidentes Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero.
Al hacer su ingreso a la sala, el todavía rey Juan Carlos fue ovacionado por los invitados, que le dieron un cerrado aplauso.
Tras la interpretación del himno nacional y la lectura de la ley orgánica de abdicación aprobada por el Parlamento, los asistentes escucharon el histórico discurso con el que, el pasado 2 de junio, el monarca, de 76 años, anunció su decisión de dejar la Jefatura del Estado en manos de su hijo, Felipe VI, de 46 años. “Una nueva generación reclama el papel protagonista”, volvieron a sonar las palabras del monarca, junto con su afirmación de que “el Príncipe de Asturias tiene la madurez, la preparación y la responsabilidad para asumir con plenas garantías la Jefatura del Estado”. El momento para la posteridad llegó a continuación, cuando el rey Juan Carlos firmó la ley de abdicación y Rajoy refrendó el acto. Al regresar al sitio en el que estaba sentado, Juan Carlos de Borbón se fundió en un abrazo con su hijo, con el que también intercambió la posición, en un gesto simbólico que escenificó el cambio de trono.
La reina Sofía y la princesa de Asturias, Letizia Ortiz, estuvieron al lado de sus esposos durante el acto, en el que también se hicieron presentes las hijas de los futuros reyes, Leonor y Sofía; la infanta Elena y las hermanas de Juan Carlos de Borbón. La gran ausente fue la infanta Cristina, imputada por evasión fiscal y lavado de capitales junto a su esposo, el duque de Palma Iñaki Urdangarín, centro de una trama de corrupción que puso en jaque a la corona española y precipitó la abdicación del rey Juan Carlos. La hija menor del rey tampoco participará de los actos que tendrán lugar hoy cuando su hermano sea proclamado Jefe de Estado en el Congreso.
Con la sanción de la ley de abdicación, el rey Juan Carlos formalizó su renuncia a la Jefatura del Estado a favor de su hijo, el Príncipe Felipe, quien se convertirá en monarca cuando la norma entre en vigor -a la medianoche- una vez publicada en el Boletín del Estado.
Ahora, la infanta Leonor, hija mayor de los príncipes, pasará a ser la princesa de Asturias y heredera de la corona. (Télam-especial)
Al hacer su ingreso a la sala, el todavía rey Juan Carlos fue ovacionado por los invitados, que le dieron un cerrado aplauso.
Tras la interpretación del himno nacional y la lectura de la ley orgánica de abdicación aprobada por el Parlamento, los asistentes escucharon el histórico discurso con el que, el pasado 2 de junio, el monarca, de 76 años, anunció su decisión de dejar la Jefatura del Estado en manos de su hijo, Felipe VI, de 46 años. “Una nueva generación reclama el papel protagonista”, volvieron a sonar las palabras del monarca, junto con su afirmación de que “el Príncipe de Asturias tiene la madurez, la preparación y la responsabilidad para asumir con plenas garantías la Jefatura del Estado”. El momento para la posteridad llegó a continuación, cuando el rey Juan Carlos firmó la ley de abdicación y Rajoy refrendó el acto. Al regresar al sitio en el que estaba sentado, Juan Carlos de Borbón se fundió en un abrazo con su hijo, con el que también intercambió la posición, en un gesto simbólico que escenificó el cambio de trono.
La reina Sofía y la princesa de Asturias, Letizia Ortiz, estuvieron al lado de sus esposos durante el acto, en el que también se hicieron presentes las hijas de los futuros reyes, Leonor y Sofía; la infanta Elena y las hermanas de Juan Carlos de Borbón. La gran ausente fue la infanta Cristina, imputada por evasión fiscal y lavado de capitales junto a su esposo, el duque de Palma Iñaki Urdangarín, centro de una trama de corrupción que puso en jaque a la corona española y precipitó la abdicación del rey Juan Carlos. La hija menor del rey tampoco participará de los actos que tendrán lugar hoy cuando su hermano sea proclamado Jefe de Estado en el Congreso.
Con la sanción de la ley de abdicación, el rey Juan Carlos formalizó su renuncia a la Jefatura del Estado a favor de su hijo, el Príncipe Felipe, quien se convertirá en monarca cuando la norma entre en vigor -a la medianoche- una vez publicada en el Boletín del Estado.
Ahora, la infanta Leonor, hija mayor de los príncipes, pasará a ser la princesa de Asturias y heredera de la corona. (Télam-especial)