04 Agosto 2014
NI JUICIO NI EXPECTATIVAS. Aconseja la coach Natalia Sleiman. GENTILEZA SEBASTIÁN georgieff
La coach profesional tucumana Natalia Sleiman advirtió que si bien en nuestro país no está tan difundido El Trabajo de Byron Katie, las prácticas del coaching ontológico logran objetivos similares. Por ejemplo, mencionó la aceptación de la realidad (lo que es es, dice Katie).
“Reconocer la realidad tal cual es nos habilita a ‘despegarnos’ de los pensamientos que crean sufrimiento. Lo que es, es. Resistirnos a ello puede hasta enfermarnos, acabar con relaciones, perder un trabajo, frenar el progreso. En el Coaching Ontológico la indagación es la base del aprendizaje, la base para redescubrirnos una y otra vez; preguntarnos acerca de lo que creemos nos abre la posibilidad a la libertad, al gozo, al amor, a proyectarnos desde un ‘punto cero’, desde el presente, con la fuerza que nos da romper con viejas alianzas”, subraya Sleiman.
“Al ver la realidad tal y como es -añade- nos damos cuenta qué podemos hacer y qué no, el mundo de las posibilidades se torna amplio y certero a la vez”.
Sin embargo, esto que suena tan sencillo al oído cuesta mucho después llevarlo a la práctica. ¿A qué se debe?
Natalia explica: “porque abrazar la realidad tal cual es implica renunciar al beneficio que obtengo peleándome con ella. La gran llave maestra es explorar los juicios, las opiniones que tenemos sobre las personas y las cosas ¿Cuándo las aprendí? Explora tus juicios, y ¡desconfía de ellos! Juicios, emociones, corporalidad, expectativas son llaves maestras para re-descubrirnos, re-encontrarnos con quienes somos realmente, antes de haber hecho alianzas que nos dejaron pequeños ante la vida”. Como ejemplo enumera las frases: “ellos no pudieron, yo tampoco” , “mamá murió de cáncer, yo no merezco tener éxito”, “nunca me llevé bien con mis jefes, ahora tampoco”, “me enojan los impuntuales”.
“Como en el método de Byron Katie, el Coaching Ontológico utiliza las preguntas, sin juicio ni expectativa, y abre la posibilidad a un renacer del alma. Y con ello las relaciones, el trabajo, las empresas se abren a despertar su máximo potencial”, finaliza.
“Reconocer la realidad tal cual es nos habilita a ‘despegarnos’ de los pensamientos que crean sufrimiento. Lo que es, es. Resistirnos a ello puede hasta enfermarnos, acabar con relaciones, perder un trabajo, frenar el progreso. En el Coaching Ontológico la indagación es la base del aprendizaje, la base para redescubrirnos una y otra vez; preguntarnos acerca de lo que creemos nos abre la posibilidad a la libertad, al gozo, al amor, a proyectarnos desde un ‘punto cero’, desde el presente, con la fuerza que nos da romper con viejas alianzas”, subraya Sleiman.
“Al ver la realidad tal y como es -añade- nos damos cuenta qué podemos hacer y qué no, el mundo de las posibilidades se torna amplio y certero a la vez”.
Sin embargo, esto que suena tan sencillo al oído cuesta mucho después llevarlo a la práctica. ¿A qué se debe?
Natalia explica: “porque abrazar la realidad tal cual es implica renunciar al beneficio que obtengo peleándome con ella. La gran llave maestra es explorar los juicios, las opiniones que tenemos sobre las personas y las cosas ¿Cuándo las aprendí? Explora tus juicios, y ¡desconfía de ellos! Juicios, emociones, corporalidad, expectativas son llaves maestras para re-descubrirnos, re-encontrarnos con quienes somos realmente, antes de haber hecho alianzas que nos dejaron pequeños ante la vida”. Como ejemplo enumera las frases: “ellos no pudieron, yo tampoco” , “mamá murió de cáncer, yo no merezco tener éxito”, “nunca me llevé bien con mis jefes, ahora tampoco”, “me enojan los impuntuales”.
“Como en el método de Byron Katie, el Coaching Ontológico utiliza las preguntas, sin juicio ni expectativa, y abre la posibilidad a un renacer del alma. Y con ello las relaciones, el trabajo, las empresas se abren a despertar su máximo potencial”, finaliza.
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