Por Gustavo Rodríguez
04 Agosto 2014
MUDANZA. César Montiglio dejó Atlético para probar suerte en Mitre. LA GACETA / FOTO DE INÉS QUINTEROS ORIO (ARCHIVO)
Los dirigentes del interior no están con fiebre, pero lo mismo van levantando temperatura corporal. El único responsable de esta situación es el Consejo Federal, cuerpo afista que está siendo duramente cuestionado por los últimos manejos. El fallecimiento de Julio Grondona puso paño fríos a la polémica, pero una vez que vuelva la actividad a la AFA, muchos exigirán explicaciones.
“El malestar está, no se lo puede ocultar. Es un tema que se lo deberá tratar cuanto antes en la AFA”, explica Mario Leito, presidente de Atlético que escuchó quejas de varios directivos de distintos puntos del país.
Los presidentes de los clubes del Argentino Federal A entienden que fueron avasallados por Gustavo Cereza. Miraron con desconfianza cuando los encargado de conducirlo, decidieron invitar a 20 equipos sin ningún mérito deportivo y explotaron de bronca cuando observaron que los clubes que llegaron por la ventana al certamen están invirtiendo una fortuna para quedarse con uno de los 10 ascensos a la B Nacional que están en juego.
“Es una vergüenza lo que está pasando. Le abrieron las puertas a los directivos millonarios y se olvidaron de los clubes que la vienen peleando desde hace tiempo”, le comenta un salteño a LG Deportiva.
El caso más emblemático es Mitre, de Santiago del Estero. El equipo, después de haberse quedado siempre a mitad de camino en el Argentino B, contrató a un técnico experimentado -Miguel Ángel “Zurdo” López- y sumó casi 20 jugadores, entre los que aparecen varios conocidos por los tucumanos como los ex Atlético Juan Pablo Pereyra y César Montiglio y los ex San Martín Enzo Noir y Gonzalo Parisi. Un datito más que despertó envidia: el plantel ya está instalado en Córdoba para jugar amistosos contra Instituto, Belgrano y Talleres.
Los 40 equipos estarán divididos en cinco zonas de ocho cada una. Después de jugar dos rondas, ascenderán los que terminen primero en cada grupo, mientras que los segundos, los terceros, los cuartos y el mejor quinto (16 en total) jugarán los playoffs -eliminación directa- hasta que queden los otros dos equipos que sacarán pasaje a la B Nacional.
Todo bien con el formato del certamen, no así con su programación. La mayoría de los clubes comenzó a trabajar los primeros días de julio, pero a fines del mes pasado se confirmó que jugarían a partir del 24 de agosto. “Esa fue otra falta de respeto. Esa improlijidad generó un perjuicio económico importante. Gastamos un mes más de sueldo de los jugadores. Si hubieran definido esa fecha desde un principio, los trabajos precompetitivos hubieran comenzado más tarde”, se quejó un santiagueño que prefiere mantener su nombre en reserva porque saben que pueden recibir represalias. Y más aún si se tiene en cuenta lo que tienen pensado hacer.
Ya comenzaron a charlar con los dirigentes del interior que integran el Comité Ejecutivo de AFA -entre ellos Leito- para que inicie una serie de conversaciones que termine en la presentación de un proyecto que hará temblar a los directivos del Consejo Federal: que esta competencia tenga su propios representantes -como ocurre con las otras categorías- para que ellos decidan sistema de disputa, reglamentos e inicios de competencia, entre otros puntos. Una propuesta para nada descabellada.
“El malestar está, no se lo puede ocultar. Es un tema que se lo deberá tratar cuanto antes en la AFA”, explica Mario Leito, presidente de Atlético que escuchó quejas de varios directivos de distintos puntos del país.
Los presidentes de los clubes del Argentino Federal A entienden que fueron avasallados por Gustavo Cereza. Miraron con desconfianza cuando los encargado de conducirlo, decidieron invitar a 20 equipos sin ningún mérito deportivo y explotaron de bronca cuando observaron que los clubes que llegaron por la ventana al certamen están invirtiendo una fortuna para quedarse con uno de los 10 ascensos a la B Nacional que están en juego.
“Es una vergüenza lo que está pasando. Le abrieron las puertas a los directivos millonarios y se olvidaron de los clubes que la vienen peleando desde hace tiempo”, le comenta un salteño a LG Deportiva.
El caso más emblemático es Mitre, de Santiago del Estero. El equipo, después de haberse quedado siempre a mitad de camino en el Argentino B, contrató a un técnico experimentado -Miguel Ángel “Zurdo” López- y sumó casi 20 jugadores, entre los que aparecen varios conocidos por los tucumanos como los ex Atlético Juan Pablo Pereyra y César Montiglio y los ex San Martín Enzo Noir y Gonzalo Parisi. Un datito más que despertó envidia: el plantel ya está instalado en Córdoba para jugar amistosos contra Instituto, Belgrano y Talleres.
Los 40 equipos estarán divididos en cinco zonas de ocho cada una. Después de jugar dos rondas, ascenderán los que terminen primero en cada grupo, mientras que los segundos, los terceros, los cuartos y el mejor quinto (16 en total) jugarán los playoffs -eliminación directa- hasta que queden los otros dos equipos que sacarán pasaje a la B Nacional.
Todo bien con el formato del certamen, no así con su programación. La mayoría de los clubes comenzó a trabajar los primeros días de julio, pero a fines del mes pasado se confirmó que jugarían a partir del 24 de agosto. “Esa fue otra falta de respeto. Esa improlijidad generó un perjuicio económico importante. Gastamos un mes más de sueldo de los jugadores. Si hubieran definido esa fecha desde un principio, los trabajos precompetitivos hubieran comenzado más tarde”, se quejó un santiagueño que prefiere mantener su nombre en reserva porque saben que pueden recibir represalias. Y más aún si se tiene en cuenta lo que tienen pensado hacer.
Ya comenzaron a charlar con los dirigentes del interior que integran el Comité Ejecutivo de AFA -entre ellos Leito- para que inicie una serie de conversaciones que termine en la presentación de un proyecto que hará temblar a los directivos del Consejo Federal: que esta competencia tenga su propios representantes -como ocurre con las otras categorías- para que ellos decidan sistema de disputa, reglamentos e inicios de competencia, entre otros puntos. Una propuesta para nada descabellada.
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