24 Septiembre 2014
CAPTURA DE PANTALLA
BUENOS AIRES.- Gastón Aguirre, el motoarrebatador que fue filmado mientras intentaba robar a un turista, justificó su actitud al señalar que "robar no le hace mal a nadie".
Durante una entrevista anoche en "América 24", Aguirre argumentó que el día que fue sorprendido al tratar de robar la mochila a un turista que se desplazaba en bicicleta por el barrio porteño de La Boca sólo buscaba dinero para el cumpleaños de su hijo.
"Estaba mal, estaba mal con mi familia, hacía cinco meses que no lo veía. Era el cumpleaños de mi hijo, y quería verlo con plata, por eso salí a robar", dijo el delincuente en una entrevista con Mauro Viale.
"Es algo que hice después de 14 años. El arma la tenía para defender mi casa. La moto la estoy pagando hace tres años y me salió 26 mil pesos. Yo trabajo en una panadería, me encargo de ir a buscar la harina, pero ahora no tengo trabajo por esto. Yo no quiero matar a nadie. Mis dos causas son por robo, jamás lastimé a nadie. El arma la llevé para robar. No iba a disparar, a veces el arma la llevás para asustar, o para lastimar o para matar, yo no la usé para nada de eso. No le saqué nada", afirmó Aguirre.
"En Facebook todos dicen 'hay que matar al negro a ese'. Yo no quiero que me feliciten. Yo no pido que me entienda nadie. Yo en otro momento hice las cosas bien. Cuando me agarra la Metropolitana no tengo nada, me pusieron un bolso en el cuello. Había tres pibes y el bolso era de uno de ellos. Yo venía del colegio y me detienen por el robo al candiense. Tenían una foto", acusó el hombre.
"Cuando empecé a robar tenía 17 años y pensaba de otra manera. Era una forma de vida. Me gsutaba salir, ir a bailar, tener cosas lindas. Yo tengo un nene de 14 años que no lo veo hace 10 años. Ahora estaba desesperado. Fue un error. No tendría que haber robado jamás, porque me arruinó la vida", dijo Aguirre.
"Lo que me molesta es que no haya tenido la oportunidad de hablar y decir lo que pienso, y que digan que salí a matar, porque no fue así", agregó.
Admitió que el arma que portaba estaba cargada, pero aclaró que él nunca mató a nadie. "El peor pecado es violar y matar", se defendió, al tiempo que reconoció: "robar me arruinó la vida".
"Estoy arrepentido de haber ido a robar. Si no hubiese ido a robar ese día, el muchacho no me habría filmado. Pero no estoy arrepentido por haber sido filmado, sino por haber salido a robar", remató.
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