26 Diciembre 2014
ARCHIVO LA GACETA
“Resulta por demás peligroso para la investigación, tanto por su posible entorpecimiento, como por el peligro de fuga, la adopción de una medida de esta naturaleza”, expresó la Unidad de Investigaciones Financieras de la Nación (UIF), luego de que la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán concediera la prisión domiciliara a Rubén “La Chancha” Ale, acusado de liderar una presunta asociación ilícita dedicada al lavado de dinero proveniente de actividades delictivas.
La UIF es querellante en la causa por la que se encuentra detenido Rubén Ale, su hermano Ángel “El Mono” Ale y Maria Jesús Rivero, entre otros. Su titular, José Sbatella impulsó la denuncia en la Justicia Federal, luego de una presentación que había realizado Susana Trimarco, madre de María de los Ángeles ‘Marita’ Verón, la joven secuestrada en abril de 2002 para obligarla a ejercer la prostitución en La Rioja, según determinó la Corte Suprema de Justicia de Tucumán.
La Cámara de Apelaciones dictó la resolución luego de que la Cámara Federal de Casación Penal, con la firma de los camaristas Ángela Ledesma, Alejandro Slokar y Pedro David ordenara revisar el planteo que había realizado el abogado de Rubén Ale, Alejandro Biagosh, por el estado de salud del ex presidente de San Martín de Tucumán.
“La Chancha” se había internado en la terapia intensiva de un sanatorio céntrico cuando el juez Federal N° 2 Fernando Poviña lo procesó dictando la prisión preventiva. Estuvo alojado en ese centro médico hasta que en septiembre fue trasladado al hospital Avellaneda, porque no podía seguir afrontando los fastos del sanatorio”, había explicado el abogado Biagosh. A principios de noviembre Poviña dispuso su traslado al hospital Penitenciario de Ezeiza. Ale padece obesidad mórbida, mal de Parkinson, diabetes, hipertensión arterial, entre otras enfermedades.
“En el hospital de Ezeiza no tenía los elementos para tratar sus dolencias. En su casa, en cambio, cuenta con los acondicionamientos especiales como tubos de oxígeno, máscaras para apnea de sueño, entre otros”, precisó Biagosh, al justificar el pedido que había realizado a la Justicia.
El organismo de Sbatella consideró que la resolución es inexplicable, ya que choca con los antecedentes de la causa, entre los que mencionó que la UIF recusó por temor de parcialidad al camarista Ricardo Sanjuán, vinculado a San Martín, donde Ale fue Presidente.
“En el marco de una declaración testimonial reservada se dieron detalles de un plan del clan Ale para asesinar al fiscal Carlos Gonella (titular de la Procuraduria de Criminalidad Económica y Lavado de Activos - Procelac) y atentar contra la vida de los abogados que intervienen en la causa, la hermana de Susana Trimarco, Alicia, y uno de sus abogados, José D’Antona”, aseguró el organismo que dirige Sbatella.
También se mencionó que Rubén Ale repitió el mismo modus operandi de cuando habían ordenado su detención en una causa por usurpación de tierras y retención indebida de una cosecha de soja para su venta en el mercado negro, en 2011. “Siempre que lo detienen Ale ‘se enferma’”, afirmó el organismo dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
La UIF es querellante en la causa por la que se encuentra detenido Rubén Ale, su hermano Ángel “El Mono” Ale y Maria Jesús Rivero, entre otros. Su titular, José Sbatella impulsó la denuncia en la Justicia Federal, luego de una presentación que había realizado Susana Trimarco, madre de María de los Ángeles ‘Marita’ Verón, la joven secuestrada en abril de 2002 para obligarla a ejercer la prostitución en La Rioja, según determinó la Corte Suprema de Justicia de Tucumán.
La Cámara de Apelaciones dictó la resolución luego de que la Cámara Federal de Casación Penal, con la firma de los camaristas Ángela Ledesma, Alejandro Slokar y Pedro David ordenara revisar el planteo que había realizado el abogado de Rubén Ale, Alejandro Biagosh, por el estado de salud del ex presidente de San Martín de Tucumán.
“La Chancha” se había internado en la terapia intensiva de un sanatorio céntrico cuando el juez Federal N° 2 Fernando Poviña lo procesó dictando la prisión preventiva. Estuvo alojado en ese centro médico hasta que en septiembre fue trasladado al hospital Avellaneda, porque no podía seguir afrontando los fastos del sanatorio”, había explicado el abogado Biagosh. A principios de noviembre Poviña dispuso su traslado al hospital Penitenciario de Ezeiza. Ale padece obesidad mórbida, mal de Parkinson, diabetes, hipertensión arterial, entre otras enfermedades.
“En el hospital de Ezeiza no tenía los elementos para tratar sus dolencias. En su casa, en cambio, cuenta con los acondicionamientos especiales como tubos de oxígeno, máscaras para apnea de sueño, entre otros”, precisó Biagosh, al justificar el pedido que había realizado a la Justicia.
El organismo de Sbatella consideró que la resolución es inexplicable, ya que choca con los antecedentes de la causa, entre los que mencionó que la UIF recusó por temor de parcialidad al camarista Ricardo Sanjuán, vinculado a San Martín, donde Ale fue Presidente.
“En el marco de una declaración testimonial reservada se dieron detalles de un plan del clan Ale para asesinar al fiscal Carlos Gonella (titular de la Procuraduria de Criminalidad Económica y Lavado de Activos - Procelac) y atentar contra la vida de los abogados que intervienen en la causa, la hermana de Susana Trimarco, Alicia, y uno de sus abogados, José D’Antona”, aseguró el organismo que dirige Sbatella.
También se mencionó que Rubén Ale repitió el mismo modus operandi de cuando habían ordenado su detención en una causa por usurpación de tierras y retención indebida de una cosecha de soja para su venta en el mercado negro, en 2011. “Siempre que lo detienen Ale ‘se enferma’”, afirmó el organismo dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.