15 Julio 2015
REUTERS
PARIS, Francia.- El ministro de Finanzas francés, Michel Sapin, apoyó hoy la petición del Fondo Monetario Internacional (FMI) para que se alivie la deuda griega, en una entrevista con el canal BFMTV. "Hay que ayudar a Grecia, necesitamos solidaridad, pero no podremos ayudar a Grecia si mantenemos la misma carga de deuda", sostuvo.
En un estudio actual sobre la sostenibilidad de la deuda griega, el FMI calcula que en los próximos dos años la deuda total del país aumentará a casi el 200 % del producto interno bruto (PIB). Según las normas de la Unión Europea, a un país de la unión monetaria sólo se le permite endeudarse hasta el 60 % de su PIB.
Sapin subrayó que el FMI no busca una quita, sino un alivio. Esta exigencia, agregó Sapin, no es nueva. Francia la apoya desde el inicio de las negociones, precisó. Ese tipo de alivios están previstos en el acuerdo al que se llegó en la cumbre del euro celebrada el lunes, dijo el ministro francés. Los jefes de Estado y de gobierno esbozaron la idea de pensar sobre plazos más largos para devolver el dinero en caso de llegar a un nuevo programa de ayuda, consignó la agencia DPA.
Crédito puente
La Comisión Europea propondrá dar a Grecia un crédito puente por 7.000 millones de euros (7.700 millones de dólares) para cubrir sus necesidades de financiamiento de julio, usando el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera (MEEF), según documentos del órgano ejecutivo de la UE.
La propuesta, a la que Reuters tuvo acceso, indica que el crédito puente tendría un vencimiento máximo de tres meses y que se devolvería al MEEF con dinero que Grecia recibiría del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) -el fondo de rescate de la zona euro- cuando concluyan las negociaciones sobre el próximo rescate por 86.000 millones de euros a tres años.
"Corralito", hasta el viernes
Los bancos griegos permanecerán cerrados por lo menos hasta el viernes, según el nuevo decreto publicado hoy por el Ministerio de Finanzas de ese país, que amplía el espectro de operaciones que podrán llevarse a cabo en aquellas sucursales que hasta ahora sólo estaban abiertas para el pago de pensiones y subsidios de desempleo.
El decreto firmado hoy por el viceministro de Finanzas griego, Dimitris Mardas, mantiene el límite para el retiro de efectivo en cajeros automáticos en 60 euros diarios, y en 120 euros el máximo semanal para los jubilados.
En tanto, las sucursales abiertas para los jubilados y desempleados podrán ahora gestionar también el pago de cuotas y créditos de todo tipo, por ejemplo deudas al Estado o a empresas públicas, a los fondos de pensiones estatales o a seguros privados, consignó la agencia Reuters.
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