“El Gobierno nacional se caracteriza por un gabinete de banqueros y ejecutivos”

Jorge Altamira visitó Tucumán para participar del Bicentenario.

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18 Julio 2016
Fue cinco veces candidato a la Presidencia de la Nación. Perdió las cinco elecciones. Pero en ese tiempo, el Partido Obrero (PO) ha ido consiguiendo espacios en cuerpos legislativos de todo el país. El político, periodista y escritor Jorge Altamira visitó Tucumán para participar del Bicentenario, y dialogó con LA GACETA. Fiel a su estilo, el dirigente bonaerense realizó una lectura crítica de la coyuntura nacional.

- A 200 años de la Independencia, ¿qué análisis hace del ahora?

- Si en aquel momento teníamos el fenómeno del colonialismo español y los albores de la dominación británica, hoy Argentina es una colonia financiera del capital internacional. No sólo desde lo económico, sino por los lazos de dependencia. Hay una deuda pública de 300.000 millones de dólares, que está en manos de unos pocos grupos económicos. También sucede en lo político. El gobierno actual se caracteriza por un gabinete de banqueros, traders, ejecutivos... pareciera que Argentina está gobernada por la bolsa de Nueva York.

-Hubo importantes signos de acercamiento entre EEUU y Argentina. ¿Cómo los interpreta?

-(El presidente estadounidense, Barack) Obama vino aquí para respaldar a (Mauricio) Macri, que no tiene poder político. Es minoría en el Congreso y no tiene armado propio. Se apareció como un regalo para EEUU: un presidente del palo de ellos. Además, Macri está del lado de EEUU contra China; en tanto que los kirchneristas buscaban respaldarse en China. El partido comunista tiene que preocuparse porque la gente entienda lo que planteamos ante problemas que no se resuelven, sino que se agravan. La crisis mundial que vivimos en 2008, luego la crisis del euro, ahora el brexit de Gran Bretaña que es sumamente feroz... todos estos fenómenos van a acentuar las contradicciones de estas salidas económicas y políticas, y van a hacer que el pueblo se despierte.

-En distintas provincias hubo progresos del PO en cargos electivos. ¿Por qué no en Tucumán?

-Es un problema complejo. Siempre estamos estudiándolo. En cierto modo, Tucumán fue pionera, porque cuando (el ex gobernador José) Alperovich convoca la Constituyente para la reforma (de 2006) y su reelección, tuvimos dos bancas. Luego, el gobierno de Alperovich fue beneficiado por el boom de productos agrícolas, que le permitió tener un peso descomunal. Pero el Partido Obrero intervino en todas las luchas. No hemos tenido en este desarrollo una homogeneidad; lo de Salta no se repite en provincia de Buenos Aires. Las peculiaridades de cada lugar marcan ritmos diferentes. En un momento parecía que nos comíamos Córdoba; seguimos bien, pero ya no en quinta velocidad. Siempre nos estamos interrogando, no ignoramos esto. Siempre digo: trabajemos en el examen de los resultados de lo que hacemos. A veces, lo que uno dice puede conformar, porque suena bien y corresponde a las convicciones. Pero para transformar la sociedad hay que ver por qué canal esas ideas echarán raíces en la población.

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