11 Octubre 2016
La noticia causó sorpresa en la Policía. Cerca del mediodía del feriado de ayer, llegó una orden de aprehensión a la ex Brigada para un comisario, un subcomisario y un oficial. Los tres podrán declarar durante la mañana de hoy, luego de lo cual se resolverá si recuperan la libertad o se pide su detención.
Se trata del jefe de la división Sustracción de Automotores, comisario Cándido Galván, del subcomisario Daniel Luna (tercer jefe del área) y del oficial auxiliar Carlos Sebastián Molina. Los tres fueron trasladados a la división Bomberos, donde quedaron aprehendidos por orden del fiscal de Instrucción de la V° Nominación, Washington Navarro Dávila, quien les tomará declaración durante la mañana de hoy.
Los delitos por los cuales el fiscal los privó de la libertad son abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Sin embargo, cuando se le consultó por los detalles del caso, Navarro Dávila prefirió no aportar ninguna información hasta no escuchar los testimonios de los tres policías involucrados.
Según explicó Mónica López, la abogada que representa al comisario Galván, su cliente no tiene nada que ver con el caso. “Supuestamente se trata del secuestro de un vehículo que no habría sido comunicado a la Fiscalía, pero es imposible que Galván haya participado del procedimiento porque él estaba de descanso en su casa cuando se anotició de todo esto”, aseguró la letrada.
La ausencia de Galván fue confirmada por el abogado de la fuerza, Roque Yñigo, quien en este caso representa a Luna y a Molina. Además, el letrado aclaró que Luna se encontraba a cargo de la división en ese momento. “Estamos esperando que el fiscal nos haga conocer la imputación para tener en claro de qué los acusa porque hasta el momento no tuvimos acceso a esa información”, respondió ante la consulta de LA GACETA. “Por lo que me comentaron mis defendidos, ellos hicieron un control de rutina y detectaron una camioneta que tenía los números de motor y chasis adulterados. Ese vehículo y su documentación están secuestrados, y fueron puestos a disposición de la Fiscalía”, explicó Yñigo.
El abogado dijo que le sorprendió la orden de aprehensión emitida por Navarro Dávila. “La veo apresurada a la medida, pero en su debido momento el juez de Instrucción tendrá que controlar esta situación de privación de la libertad, como lo vamos a pedir”, adelantó.
En tanto, la cúpula de la Dirección General de Investigación Criminal y Delitos Complejos (ex Brigada) informó a este diario que se pusieron a disposición de la Justicia todos los elementos necesarios para que la situación pueda aclararse. Con el mismo objetivo, se inició una investigación administrativa a fin de conocer qué ocurrió realmente y desligar o no de responsabilidades al personal policial aprehendido.
Se trata del jefe de la división Sustracción de Automotores, comisario Cándido Galván, del subcomisario Daniel Luna (tercer jefe del área) y del oficial auxiliar Carlos Sebastián Molina. Los tres fueron trasladados a la división Bomberos, donde quedaron aprehendidos por orden del fiscal de Instrucción de la V° Nominación, Washington Navarro Dávila, quien les tomará declaración durante la mañana de hoy.
Los delitos por los cuales el fiscal los privó de la libertad son abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público. Sin embargo, cuando se le consultó por los detalles del caso, Navarro Dávila prefirió no aportar ninguna información hasta no escuchar los testimonios de los tres policías involucrados.
Según explicó Mónica López, la abogada que representa al comisario Galván, su cliente no tiene nada que ver con el caso. “Supuestamente se trata del secuestro de un vehículo que no habría sido comunicado a la Fiscalía, pero es imposible que Galván haya participado del procedimiento porque él estaba de descanso en su casa cuando se anotició de todo esto”, aseguró la letrada.
La ausencia de Galván fue confirmada por el abogado de la fuerza, Roque Yñigo, quien en este caso representa a Luna y a Molina. Además, el letrado aclaró que Luna se encontraba a cargo de la división en ese momento. “Estamos esperando que el fiscal nos haga conocer la imputación para tener en claro de qué los acusa porque hasta el momento no tuvimos acceso a esa información”, respondió ante la consulta de LA GACETA. “Por lo que me comentaron mis defendidos, ellos hicieron un control de rutina y detectaron una camioneta que tenía los números de motor y chasis adulterados. Ese vehículo y su documentación están secuestrados, y fueron puestos a disposición de la Fiscalía”, explicó Yñigo.
El abogado dijo que le sorprendió la orden de aprehensión emitida por Navarro Dávila. “La veo apresurada a la medida, pero en su debido momento el juez de Instrucción tendrá que controlar esta situación de privación de la libertad, como lo vamos a pedir”, adelantó.
En tanto, la cúpula de la Dirección General de Investigación Criminal y Delitos Complejos (ex Brigada) informó a este diario que se pusieron a disposición de la Justicia todos los elementos necesarios para que la situación pueda aclararse. Con el mismo objetivo, se inició una investigación administrativa a fin de conocer qué ocurrió realmente y desligar o no de responsabilidades al personal policial aprehendido.
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