27 Octubre 2016
NAVARRO DÁVILA. El fiscal que investiga a los dos efectivos.
El fiscal de Instrucción Washington Navarro Dávila pidió la prisión preventiva para dos policías, sospechados de haber dejado libre a una mujer que tenía pedido de captura, cuando desde la fiscalía V° se les habría ordenado que la aprehendieran. Formalmente, se los acusa por los delitos de “incumplimiento de funcionario público en concurso real con falsificación de documento público en perjuicio de la administración y la fe pública”.
Los imputados son el subcomisario Daniel Luna, quien al momento del hecho investigado se encontraba a cargo de la división Sustracción Automotores, y el oficial auxiliar Carlos Sebastián Molina. Si el juzgado de Instrucción avala el pedido de Navarro Dávila, los policías podrían pasar hasta dos años privados de su libertad, mientras se investiga el caso. En un principio, también se había aprehendido al jefe de la sección, Cándido Galván. Sin embargo, se lo dejó en libertad porque el día de los hechos él estaba de descanso.
Fundamentos
“El 9 de octubre, siendo las 21.33, Molina se comunicó con la ayudante fiscal Natalia Zurita comunicando que en circunstancias en que el personal de la división Sustracción de Automotores realizaba recorridos preventivos por avenida Colón al 200 se procedió a controlar una camioneta Toyota Hilux, la cual era conducida por la señora Hebe Luz Zaira Castro y presentaba adulterados los números de ventanilla y tenía pedido de secuestro de Policía Federal”, explica Navarro Dávila en el documento.
De acuerdo a ese texto, los policías le comunicaron la situación a Zurita y esta les transmitió la orden del fiscal de que aprehendieran a la mujer. No obstante, tanto Luna como Molina la pusieron en libertad y redactaron en el acta: “que la doctora Zurita, interiorizada de los pormenores del caso, dispuso que por orden de su titular no se adopte ningún tipo de medida privativa de la libertad en contra de Castro y se le reciba declaración informativa”.
Más irregularidades
Navarro Dávila explicó que no sólo no existe esa declaración informativa, sino que aparece una supuesta declaración ampliatoria (“declaración llamativa por cuanto no podían desconocer que si prestaba declaración debía hacerlo en calidad de imputada, con todas las formalidades de la ley”) donde la sospechosa asegura que compró el vehículo de buena fe.
Además, el funcionario judicial remarcó que la conductora de la camioneta tenía cuatro órdenes de captura y un pedido de paradero vigentes. “Ni Molina ni Luna verificaron esa situación”, resaltó el fiscal, quien precisó ante este diario que Castro tiene 28 denuncias por estafas. “Ahora está prófuga”, agregó. Con esos argumentos, Navarro Dávila solicitó que ambos permanezcan privados de la libertad. El requerimiento ya fue presentado en el Juzgado de Instrucción de la II° Nominación, cuyo titular deberá resolver si hace lugar al pedido del fiscal o deja en libertad a los imputados.
Los imputados son el subcomisario Daniel Luna, quien al momento del hecho investigado se encontraba a cargo de la división Sustracción Automotores, y el oficial auxiliar Carlos Sebastián Molina. Si el juzgado de Instrucción avala el pedido de Navarro Dávila, los policías podrían pasar hasta dos años privados de su libertad, mientras se investiga el caso. En un principio, también se había aprehendido al jefe de la sección, Cándido Galván. Sin embargo, se lo dejó en libertad porque el día de los hechos él estaba de descanso.
Fundamentos
“El 9 de octubre, siendo las 21.33, Molina se comunicó con la ayudante fiscal Natalia Zurita comunicando que en circunstancias en que el personal de la división Sustracción de Automotores realizaba recorridos preventivos por avenida Colón al 200 se procedió a controlar una camioneta Toyota Hilux, la cual era conducida por la señora Hebe Luz Zaira Castro y presentaba adulterados los números de ventanilla y tenía pedido de secuestro de Policía Federal”, explica Navarro Dávila en el documento.
De acuerdo a ese texto, los policías le comunicaron la situación a Zurita y esta les transmitió la orden del fiscal de que aprehendieran a la mujer. No obstante, tanto Luna como Molina la pusieron en libertad y redactaron en el acta: “que la doctora Zurita, interiorizada de los pormenores del caso, dispuso que por orden de su titular no se adopte ningún tipo de medida privativa de la libertad en contra de Castro y se le reciba declaración informativa”.
Más irregularidades
Navarro Dávila explicó que no sólo no existe esa declaración informativa, sino que aparece una supuesta declaración ampliatoria (“declaración llamativa por cuanto no podían desconocer que si prestaba declaración debía hacerlo en calidad de imputada, con todas las formalidades de la ley”) donde la sospechosa asegura que compró el vehículo de buena fe.
Además, el funcionario judicial remarcó que la conductora de la camioneta tenía cuatro órdenes de captura y un pedido de paradero vigentes. “Ni Molina ni Luna verificaron esa situación”, resaltó el fiscal, quien precisó ante este diario que Castro tiene 28 denuncias por estafas. “Ahora está prófuga”, agregó. Con esos argumentos, Navarro Dávila solicitó que ambos permanezcan privados de la libertad. El requerimiento ya fue presentado en el Juzgado de Instrucción de la II° Nominación, cuyo titular deberá resolver si hace lugar al pedido del fiscal o deja en libertad a los imputados.