Con Lavallén en los palcos, Atlético volvió a ganar en el Monumental

El nuevo entrenador "Decano" destacó el triunfo de local. Los goles.

DIRIGIERON DESDE AFUERA. Lavallén, Sodero y Claut vivieron el partido a pleno en uno de los palcos del estadio Monumental. la gaceta / fotos de jorge olmos sgrosso - hector peralta DIRIGIERON DESDE AFUERA. Lavallén, Sodero y Claut vivieron el partido a pleno en uno de los palcos del estadio Monumental. la gaceta / fotos de jorge olmos sgrosso - hector peralta
12 Diciembre 2016
No pudo estar en sentado en el banco debido a un problema administrativo por los feriados no llegó su habilitación desde AFA), pero igualmente cumplió con el viejo, y cambiante, axioma que reza que técnico que debuta gana.

Pablo Lavallén, que estuvo sentado en un palco, mostró su satisfacción, al finalizar el duelo, por el 3-0 final y por el rendimiento de su equipo. “A pesar de que, desde que llegamos, tuvimos muy poco tiempo junto al plantel, le pedí a los jugadores que debían reafirmar todo lo bueno que habían hecho en la primera parte del año”, explicó el DT que no quiso llevarse los laureles de la vuelta al triunfo en casa para el “Decano”. “Es todo mérito de los jugadores. Ellos hicieron posible este triunfo”, sentenció el ex entrenador de San Martín de San Juan.

El gol de Fernando Zampedri, cuando el primer tiempo parecía morir en empate, destrabó el juego y ahí si Lavallén explicó que era algo que habían practicado desde su llegada. “Hicimos hincapié en las jugadas de pelota parada. Por suerte salió bien esa; además tuvimos otra en la que Fernando la bajó y (David) Barbona no la pudo empujar. Esas son las cosas que primero se ven, por suerte salió todo bien”, aseguró el DT.

Lavallén se fue contento no sólo por una victoria que le permitió salir airoso en su primera aparición por 25 de Mayo y Chile como entrenador “Decano”. El entrenador resaltó un triunfo clave para terminar bien el año en casa. “Había que volver a ganar como loca. Ahora hay que ganar en Buenos Aires para culminar de la mejor manera el año y después enfocarnos en lo que viene; que es muy importante”, remató, antes de dejarle un mensaje al hincha de Atlético. “Que el hincha venga a la cancha, aliente al equipo y apoye a este plantel que hizo un gran año y le regaló muchas alegrías. Espero que durante nuestro proceso, volvamos a encontrar eso que lo hizo ser un equipo sobresaliente durante la primera parte del año”.

Para el final, Lavallén dejó todo los elogios para con un plantel que le dio muy buena impresión en sus primeros días en Tucumán. “Es un equipo maduro, con personalidad y que entiende los momentos del partido. Eso es muy difícil de lograr y ya lo tienen. Ahora hay que construir más sobre eso”, concluyó.

Que Atlético no vuelva a pisar su casa hasta un 2017 que está a la vuelta de la esquina y con la Copa Libertadores como máximo objetivo, suena a despedida para la gente y para sus protagonistas.

“Los hinchas siempre estuvieron muy presente y eso, para nosotros, significa una motivación grande. Lo valoramos muchísimo”, hace una reverencia al fan “decano” Leonel Di Plácido, uno de los que encontró a partir de Independiente -fecha 6- el camino para convertirse en figura y titular de Atlético.

La herencia dejada por Juan Manuel Azconzábal se resume en compañerismo. Jamás hubo estrellas ni estrellados en el grupo. Por eso cuando “Flecha” habla del plantel lo hace siempre juntando a todo el rebaño. “Del equipo me gusta todo, la idea, que siempre intenta jugar, que intenta ser protagonista en todos lados”, dice el lateral derecho luego del 3-0 sobre Quilmes, resultado abierto a partir de una gran cabezazo de Fernando Zampedri.

“Hay que aprovecharlo. Es un goleador muy bueno y me pone muy contento su actualidad porque se lo merece. Trabaja muy duro, es una persona muy humilde que está para ayudar y para hacernos ganar los partidos”, elogia Di Plácido al artillero.

Y está la Copa pero antes Tigre y después las Fiestas. “Hoy pensamos en Tigre. Después, cada uno se irá a ver a su familia, pasará Navidad y año nuevo y cuando volvamos tendremos tiempo para pensar en la Copa. Se nos va un año inolvidable”, dice. Y sueña.

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