15 Febrero 2017
ASADO Y POLÍTICA. Jaldo, Alperovich y Manzur posaron abrazados. twitter @JalperovichOK
El vicegobernador Osvaldo Jaldo calentó la rencilla política entre el Gobierno provincial y los tucumanos que forman parte del gabinete del presidente, Mauricio Macri. “En la provincia hay una verdadera convivencia democrática, un respeto por las autoridades elegidas por la voluntad popular. Que también desde los organismos nacionales respeten a la provincia”, disparó Jaldo en una arremetida contra el secretario de Vivienda y Hábitat de la Nación, Domingo Amaya.
El ex intendente de la capital había salido en defensa de los delegados e intendentes que buscaban gestionar obras directamente con la Nación, sin la intermediación de Casa de Gobierno: “les debemos respeto a los intendentes y delegados comunales. Veo con tristeza que viene un funcionario provincial y maltrata a un hombre elegido por el pueblo. Eso no puede suceder. La democracia es respetar a los elegidos por el voto popular”, había criticado hace dos semanas.
La controversia se había iniciado a mediados de enero por las declaraciones de Jaldo, quien había requerido a la Nación que se avance con la obra pública, especialmente las de vivienda. Luego, el gobernador Juan Manzur había sostenido que la Casa Rosada envía más dinero a provincias gobernadas por sus aliados políticos. Por su parte, el titular del Plan Belgrano José Cano había afirmado que la Provincia debería destinar parte de su propio presupuesto a trabajos de infraestructura. Amaya, por último, chicaneó a Manzur y a Jaldo al decirles que no veían las obras porque recorrían la provincia en helicóptero.
Jaldo supervisó ayer obras de pavimentación en el barrio ex Aeropuerto de Banda del Río Salí y aprovechó la visita para mantener vivo el conflicto por los fondos de obra pública. El vicegobernador recordó en rueda de prensa el paso del temporal que hace dos semanas castigó a muchas localidades del este provincial como introducción para la pelea política. “Visitamos estas obras y esto demuestra a las claras que las obras en la provincia siguen. De esto se trata, de trabajar en equipo con los intendentes sin distinción de banderías políticas”. Y agregó: “por eso en la tarde de ayer (por el lunes) visitamos Yerba Buena, y todos saben que el intendente (Mariano) Campero no es de nuestro espacio político. Las intendencias de otros de otros espacios, como Concepción, Yerba Buena o Bella Vista no podrían hacer frente a las obligaciones salariales sin el apoyo de la provincia”, destacó el dirigente tranqueño.
Jaldo defendió la gestión en la Provincia, al destacar que tras superar un 2016 equilibrado económicamente, el Poder Ejecutivo presupuestó un 2017 con superávit fiscal. “Aquellos que nos cuestionan, que no nos cuestionen. Primero que se interioricen. Por eso les pedimos a los funcionarios nacionales tucumanos es que empiecen a defender Tucumán y que no defiendan o justifiquen lo indefendible, como las asistencias financieras a otras provincias -como Santa Fe como Buenos Aires o como Jujuy-”. Y guardó un bocado para el final: “habría que preguntarles a (José) Cano y a Amaya qué hicieron en un año y tres meses de Gobierno”.
Los tres juntitos
El vicegobernador también se refirió a la foto que difundió el ex gobernador y actual senador José Alperovich a través de su cuenta de Twitter, en la que aparecen abrazados junto con Manzur. “Hablamos de la economía regional, por la posibilidad que ingrese azúcar de Brasil y afecte a la producción tucumana. Trabajamos junto al senador para que llegue más obra pública a la provincia y para que el limón llegue a Estados Unidos. Alperovich ha estado al frente del gobierno durante 12 años, tiene mucho conocimiento y experiencia en al gestión de gobierno. Vive aportando permanentemente ideas para que Tucumán salga adelante”, finalizó Jaldo.
El ex intendente de la capital había salido en defensa de los delegados e intendentes que buscaban gestionar obras directamente con la Nación, sin la intermediación de Casa de Gobierno: “les debemos respeto a los intendentes y delegados comunales. Veo con tristeza que viene un funcionario provincial y maltrata a un hombre elegido por el pueblo. Eso no puede suceder. La democracia es respetar a los elegidos por el voto popular”, había criticado hace dos semanas.
La controversia se había iniciado a mediados de enero por las declaraciones de Jaldo, quien había requerido a la Nación que se avance con la obra pública, especialmente las de vivienda. Luego, el gobernador Juan Manzur había sostenido que la Casa Rosada envía más dinero a provincias gobernadas por sus aliados políticos. Por su parte, el titular del Plan Belgrano José Cano había afirmado que la Provincia debería destinar parte de su propio presupuesto a trabajos de infraestructura. Amaya, por último, chicaneó a Manzur y a Jaldo al decirles que no veían las obras porque recorrían la provincia en helicóptero.
Jaldo supervisó ayer obras de pavimentación en el barrio ex Aeropuerto de Banda del Río Salí y aprovechó la visita para mantener vivo el conflicto por los fondos de obra pública. El vicegobernador recordó en rueda de prensa el paso del temporal que hace dos semanas castigó a muchas localidades del este provincial como introducción para la pelea política. “Visitamos estas obras y esto demuestra a las claras que las obras en la provincia siguen. De esto se trata, de trabajar en equipo con los intendentes sin distinción de banderías políticas”. Y agregó: “por eso en la tarde de ayer (por el lunes) visitamos Yerba Buena, y todos saben que el intendente (Mariano) Campero no es de nuestro espacio político. Las intendencias de otros de otros espacios, como Concepción, Yerba Buena o Bella Vista no podrían hacer frente a las obligaciones salariales sin el apoyo de la provincia”, destacó el dirigente tranqueño.
Jaldo defendió la gestión en la Provincia, al destacar que tras superar un 2016 equilibrado económicamente, el Poder Ejecutivo presupuestó un 2017 con superávit fiscal. “Aquellos que nos cuestionan, que no nos cuestionen. Primero que se interioricen. Por eso les pedimos a los funcionarios nacionales tucumanos es que empiecen a defender Tucumán y que no defiendan o justifiquen lo indefendible, como las asistencias financieras a otras provincias -como Santa Fe como Buenos Aires o como Jujuy-”. Y guardó un bocado para el final: “habría que preguntarles a (José) Cano y a Amaya qué hicieron en un año y tres meses de Gobierno”.
Los tres juntitos
El vicegobernador también se refirió a la foto que difundió el ex gobernador y actual senador José Alperovich a través de su cuenta de Twitter, en la que aparecen abrazados junto con Manzur. “Hablamos de la economía regional, por la posibilidad que ingrese azúcar de Brasil y afecte a la producción tucumana. Trabajamos junto al senador para que llegue más obra pública a la provincia y para que el limón llegue a Estados Unidos. Alperovich ha estado al frente del gobierno durante 12 años, tiene mucho conocimiento y experiencia en al gestión de gobierno. Vive aportando permanentemente ideas para que Tucumán salga adelante”, finalizó Jaldo.