César Pastorino comentó que había tenido “lindos bailes” en sus trabajos previos en ingenios y en el Estado Nacional, y que, por ello, estaba preparado para las jornadas complejas que a partir de hoy enfrentará la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA) en el trance de poner en marcha el Código Procesal Penal de 2016 en Concepción (se informa por separado). El director de ese organismo estratégico para la transformación del fuero penal dijo el jueves que su objetivo era ir hacia un régimen muy ordenado, donde todos los circuitos estén a disposición de la oralidad y sirvan para mejorar el servicio. Entre otras muchas funciones, la OGA testeará la efectividad del sistema en tiempo real. “Vamos a saber cuántos minutos trabajó cada juez”, ejemplificó.
Pastorino fue designado a partir del concurso público de antecedentes y de oposición que organizó la Corte Suprema de Justicia de Tucumán. Este especialista en administración tiene a su cargo alrededor de 70 agentes que han de desarrollar todas las labores organizativas antes a cargo de los juzgados y salas penales, desde el trámite de las licencias hasta el traslado de los imputados privados de la libertad. El objetivo es que los jueces queden con las manos libres para ejercer la función que la Constitución no les permite delegar, en este caso, aplicar la ley. La OGA hará todo lo demás, incluso manejar la agenda de los magistrados y sus tiempos.
“Con el nuevo proceso penal todo quedará expuesto: las buenas y las malas prácticas. Sabremos con precisión por qué fracasó una audiencia y, por ello, disminuirán los incentivos para los procederes dilatorios”, explicó Pastorino en presencia de Andrés Garmendia, relator del alto tribunal implicado en la implementación de esta política institucional. La OGA está obligada a elevar a la Corte un informe anual de desempeño, pero ello no excluye la posibilidad de elaborar documentos en plazos más breves. Aún no está definido si esos datos estarán a disposición del público ni cómo serán presentados internamente. Con el sistema viejo, la estadística representaba un dolor de cabeza y de hecho los últimos números disponibles datan de 2017. En ese período, los Tribunales penales de Concepción abrieron alrededor de 10.000 causas y emitieron 81 sentencias definitivas.