El empresario Barenbreuker es citado para organizar su juicio

El empresario imputado todavía dispone de la posibilidad de evitar el debate: para ello debería ofrecer reparaciones o declararse culpable.

 El desarrollador Otto Fernando Barenbreuker enfrenta una imputación por la presunta perpetración de una maniobra delictiva con fideicomisos inmobiliarios. El desarrollador Otto Fernando Barenbreuker enfrenta una imputación por la presunta perpetración de una maniobra delictiva con fideicomisos inmobiliarios.

La Justicia movió las piezas procesales para que el caso del desarrollador inmobiliario Otto Fernando Barenbreuker (h) ingrese en una zona de definiciones. La Sala VI de la Cámara Penal de esta capital citó al acusado y a sus defensores, a los querellantes y al fiscal Carlos Saltor a una audiencia de orden y de conciliación programada para el 26 de julio próximo a las 8.30. Además, los vocales Stella Maris Arce, Wendy Kassar y Emilio Páez de la Torre rechazaron las recusaciones y planteos de nulidades en una resolución en la que admitieron la pérdida de un escrito de la defensa del empresario (se informa por separado).

La audiencia “posferia” permitirá organizar la actividad probatoria y fijar la fecha de inicio del juicio oral, siempre y cuando Barenbreuker no logre una salida alternativa o bien se declare culpable con el objetivo de lograr una pena menor a la que podría recibir. Cualquiera de estas opciones exige el visto bueno del fiscal Saltor.

El empresario aún dispone de la posibilidad de ofrecer una reparación integral a las víctimas de la presunta maniobra delictiva perpetrada con departamentos y locales. Es mucho el dinero en juego si se considera que 19 ciudadanos fueron supuestamente defraudados con los fideicomisos inmobiliarios que organizaba el imputado.

Algunos de los querellantes perdieron sus ahorros de toda la vida mientras que otros cedieron sumas de dinero cuantiosas, que superan los U$S 100.000. La posibilidad de reparar esos daños no luce sencilla, en parte porque fuentes judiciales indicaron que Barenbreuker no tendría bienes a su nombre. Pero, aún en el caso de que los fondos apareciesen de algún modo, ciertos querellantes no estarían dispuestos a renunciar a un juicio con todas las letras que exponga las anomalías y a una “condena ejemplar”.

En función de los intereses en juego, de la cantidad de querellantes y de la trascendencia pública del proceso, lo más probable es que haya debate. En ese caso, la audiencia llamada por el tribunal serviría para precisar las pruebas y coordinar las agendas de los distintos actores. En principio, aquellos han de definir los plazos para ofrecer y producir las medidas, y la fecha del juicio oral. Esta programación encarrilaría el proceso y serviría para disipar los riesgos de la prescripción.

Los reclamos contra Barenbreuker empezaron a intensificarse hace cuatro años, según distintos testigos citados en la resolución del juez Alejandro Tomas (N°1), que controló la investigación desplegada por la fiscala Adriana Reinoso Cuello. La decisión de enjuiciar los posibles hechos ilícitos de naturaleza económica fue confirmada el 16 de octubre de 2018. En la fase de instrucción de las denuncias penales, la Justicia consideró que había pruebas suficientes para imputar un delito con fideicomisos que supone cierta sofisticación financiera y económica. Las irregularidades atribuidas a Barenbreuker (h) -y, en causas separadas, a proyectos de Mas & Rovira y del empresario Miguel de la Cruz Grandi- habían sido expuestas en “Panorama Tucumano”, ciclo televisivo de LA GACETA.

Comentarios