Una supuesta broma que un policía intentó hacerles a sus compañeros de la comisaría de Alderetes causó tal revuelo que el oficial corre el riesgo de perder su trabajo.
Todo empezó cuando el jueves a la noche se implementó un intenso operativo de seguridad en esa ciudad luego de que balearan a una mujer en medio de un robo.
Mientras realizaban recorridos en busca de los autores del hecho, los policías interceptaron a una pareja que llevaba 280 ravioles de cocaína, $ 400 y dos rollos de bolsas transparentes.
Ambos fueron llevados a la comisaría local, donde se labraron las actas y se tomó registro fotográfico del secuestro. Pero esta mañana el operativo se vio empañado por una imagen que comenzó a viralizarse.
Se trata de una serie de fotografías donde se observa a uno de los policías de esa comisaría posando junto al dinero y la droga secuestrada.
Las fotos comenzaron a compartirse a través de WhatsApp, acompañadas por un mensaje que decía: "policía de Alderetes y gente de la Regional (Este) como siempre prendidos con la droga". Y más adelante agregaba que "tapan todo, no muestran ni la mitad de lo que encontraron".
Las imágenes pasaron de teléfono en teléfono hasta que llegaron a las autoridades de la Unidad Regional Este, que decidieron iniciaron actuaciones administrativas de manera inmediata.
Fuentes de la fuerza aseguraron a LA GACETA que "hubo una mala intención" detrás de todo esto. "El oficial que aparece en las fotos sí trabaja en la comisaría, pero en ese momento estaba haciendo un servicio adicional. Hizo un montaje para hacerle una broma a un compañero y las cosas se fueron de las manos", explicaron.
Ademas, indicaron que las mesas que aparecen tanto en las fotos del procedimiento como en las supuestas imágenes alteradas son distintas.