El regreso del fútbol a nuestro continente no es inminente, pero mientras pasan los días, es claro que está más cerca. La razón por la que se suspendió (la pandemia declarada por la covid-19) está al tope de las preocupaciones de los dirigentes y autoridades a la hora de pensar en este regreso.
Es por eso que decenas de médicos y preparadores físicos de América, reunidos por la Conmebol, participaron de una videoconferencia para establecer algunas pautas pensando en la vuelta.
Donato Villani, médico de la Selección argentina, entregó las definiciones más importantes. Una de ellas es que, cuando finalmente se decida el regreso del fútbol, se necesitarán al menos seis semanas previas de preparación después de más de tres meses parados antes de comenzar.
Además, intentó dar una acabada idea de las implicancias psicológicas que pudo haber tenido este parate, que seguramente no será gratuito.
“No van a venir de vacaciones ni de una lesión de ligamentos cruzados. Venimos de un confinamiento, cuando uno busca en un diccionario esa palabra dice que es obligar a que una persona viva en un lugar determinado. Las implicancias que tiene en la cabeza del jugador son increíbles. Hay que tener en cuenta que toda la preparación que se viene haciendo virtualmente no es fácil, algunos aumentan de peso, otros bajan por nervios, y se dan alteraciones; hubo una preparación alterada, no se pusieron botines, no estuvieron en una cancha y se genera una alteración cerebro-muscular. Por eso nos tenemos que poner a pensar en qué vamos a hacer frente a lo que nos presentó la vida, y es muy difícil porque a los sudamericanos nos cuesta investigar porque los médicos no viven del fútbol. ¿Ahora de qué nos disfrazamos, después de un confinamiento o una guerra?”, manifestó Villani.
Por la manera de jugar, Villani también sentenció: “jugando el fútbol es casi imposible que se contagien la covid”.