Una histórica obra teatral de principios del siglo pasado, que se ambienta en las plantaciones de caña y refleja el habla del Tucumán de la época, será recreada hoy a las 21 y difundida a través de la fanpage de Facebook de la Municipalidad de Tafí Viejo, con acceso gratuito. La obra “Cañas y trapiches” fue escrita por el fundador de LA GACETA, Alberto García Hamilton, y estrenada en 1909, en el teatro Belgrano, que se encontraba en San Martín 251.
La propuesta dará inicio a un ciclo de teatro leído, que busca recuperar algunos textos teatrales con temática tucumana que no han tenido mucha difusión. Por ejemplo, “Defensa y triunfo de Tucumán” -atribuido a Luis Ambrosio Morante- o “Tucumancito”, de José Antonio Saldías.
Novedosa experiencia
Bajo la dirección de Marcos Acevedo, participará un grupo de actores y actrices vocacionales que hace su primera experiencia teatral: Marcos Iñigo, Andrea Chaves, Analía Romano, Cristina Ruiz, Gabriela Quiroga, Graciela Barrientos, Nadia Romano, Pamela Terán, Vanesa Albarracín. Además, la presentación contará con las actuaciones especiales de Ignacio Hael y Marcos Zerda; ambos miembros del Teatro Estable de la provincia.
Luego de la lectura se realizará un conversatorio, donde se reflexionará sobre la relevancia y la vigencia de la obra en términos históricos y sociales, así como en lo específicamente teatral. De la charla formarán parte los teatristas Nerida Dip, Jorge Gutiérrez y Pablo Parolo.
La trama de “Cañas y trapiches” desarrolla dos situaciones centrales. Por un lado, está Don Salustio, un pequeño productor cañero que verá frustradas sus esperanzas por la exitosa cosecha ante el embargo de sus tierras. Esto es consecuencia de deudas que tiene con Don Leoncio, el dueño del ingenio.
Por otra parte, Ercilia y Luis, hijos de los antagonistas, viven un amor marcado por las desigualdades sociales y la enemistad de sus familias.
Un texto valioso
El teatrista Juan Antonio Tríbulo, autor de un estudio sobre la obra de García Hamilton, señala: “en este texto rescatado del olvido impacta su estructura, sus diálogos ricos, ágiles y precisos, y el lenguaje que utiliza, diferenciado para cada personaje”.
Tríbulo consigna que de la dramaturgia de García Hamilton sólo se conserva este texto, pero también hay noticias de otros dos llamados “El zorro azul” -una comedia de costumbres- y un unipersonal llamado “Después del baile”, escrito especialmente para la actriz Lina Esteban de Arellano.
El texto de “Cañas y trapiches” hace referencias y guarda algunas similitudes con “Barranca Abajo” (1905), de Florencio Sánchez. Se destaca la figura de una mujer en creciente emancipación y un fuerte posicionamiento de crítica social en favor de los pequeños productores en oposición al liberalismo de los grandes terratenientes.
Entusiasmo del público
El diario El Orden, donde en el momento del estreno trabajaba García Hamilton, realizó una crónica a modo de comentario, aunque no de crítica, por la cercanía que tenía con el autor.
“El estreno de anoche, que para tratarse de una obra local había despertado verdadero interés, llevó al Belgrano numerosísima concurrencia -se lee en la crónica-. Ocupaban los palcos las principales familias de nuestra sociedad y no se veía una sola localidad desocupada (...) El primer acto de ‘Cañas y trapiches’ comenzó poco antes de las diez, en medio de intensa expectativa. No vamos a hacer el análisis de la obra. Su autor se halla estrechamente vinculado a nuestro diario y nos ha pedido que reservemos nuestro juicio para evitar comentarios que es fácil prever. Nos limitaremos a decir, pues, que los aplausos interrumpían a cada instante a los artistas, produciéndose verdaderas ovaciones al finalizar cada uno de los actos y especialmente en el primero y tercero. El público pidió con insistencia que saliera el autor y se vio éste en el caso de acceder, apareciendo en el escenario nuestro compañero de tareas Alberto García Hamilton, saludado por aplausos calurosos.”