16 Febrero 2021
GRANADEROS. Son los que llevan el féretro del ex mandatario argentino.
Los restos de Carlos Menem ya descansan junto a los de su hijo Carlos Saúl Facundo, quien falleció en 1995 cuando piloteaba un helicóptero que se precipitó a tierra. Aunque profesaba la religión católica, fue sepultado en el cementerio islámico, donde está su familia, ayer por la tarde. Mañana se cumplirán los tres días de duelo nacional que decretó el presidente Alberto Fernández.
Cientos de argentinos despidieron con lágrimas en los ojos al ex presidente. El velatorio, que había comenzado a las siete de la mañana en el Salón Azul del Senado de la Nación, se extendió hasta las 15. Pero había permanecido abierto al público hasta la medianoche del domingo.
Alrededor de las 15.45 de ayer los restos mortales de Menem comenzaron a ser trasladados hasta el Cementerio Islámico de San Justo por el cuerpo de Granaderos. Menem fue despedido con todos los honores correspondientes a un ex jefe de Estado.
El cortejo fúnebre se trasladó en el marco de un imponente operativo, con una larga hilera de autos negros que llevaron 37 coronas de flores que le enviaron funcionarios de distintas corrientes políticas, incluida la propia vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.
En el cementerio de La Tablada se realizó una ceremonia íntima, de la que participaron la exesposa Zulema Yoma, su hija Zulema María Eva, sus nietos Luca Bertoldi y Malek Pocovi, hijos de Zulemita, entre otros allegados. Una banda militar le rindió los honores. El presidente del Centro Islámico Argentino, Aníbal Bachir Bakir, encabezó el responso bajo el rito musulmán. Primero leyó pasajes del Corán y luego oró en árabe y en castellano. Luego destacó que Menem llevó una vida de “entrega” a la sociedad, que “la única justicia es la justicia divina” y que “que la clase política piense más en Dios”.
LLUVIA DE ROSAS. De esta manera se despide al cortejo fúnebre.
Entre las reacciones que generó la muerte de Menem, se destaca la de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) que expresó sus condolencias. Si bien recordó que siguen impunes los atentados terroristas contra esa entidad y la embajada de Israel perpetrados durante su gestión, pidió “respeto, responsabilidad y prudencia” ante el fallecimiento del exmandatario, “sin gestos o señalamientos oportunistas”. De esta manera se diferenció de las declaraciones del presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits, que afirmó que “la muerte no indulta, es un presidente de la democracia pero esto no exculpa a Menem por los dos atentados que hubo durante su mandato y la contaminación de la investigación posterior”.
Horas antes su hija Zulemita lo había recordado: “mi papá cumplió una misión muy importante en esta vida como político, como padre, como amigo y como un hombre de paz que nunca guardo rencores ni odio contra nadie, la única forma de que Argentina va a salir adelante”.
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