Marzo podría terminar sin paros de colectivo. La llegada de subsidios nacionales para el transporte público será destinada al pago de la deuda salarial de los choferes. Sin embargo, los empresarios del sector insisten en que el conflicto de fondo sigue latente y sostienen su reclamo de años para buscar soluciones de fondo.
Los 3.600 choferes de los colectivos del transporte público de la provincia todavía no cobraron la totalidad del sueldo de febrero: recibieron un adelanto que promedia los $ 15.000, con fondos del subsidio provincial de marzo ($ 82 millones) y fondos de la recaudación por venta de boletos. La Nación depositó el lunes $ 146,4 millones de subsidios nacionales de la cuota de febrero, que estaba demorada.
Funcionarios de Casa de Gobierno confirmaron a LA GACETA que están apurando las gestiones administrativas para que los fondos puedan depositarse en las cuentas de las empresas el viernes y así completar de inmediato el pago del saldo del sueldo adeudado.
En febrero, por una situación similar, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) había convocado al paro hasta que se abone el sueldo adeudado. La medida duró 24 horas, luego de que la Provincia se comprometiera a acelerar el trámite burocrático para que los fondos de Nación se depositen en las cuentas. Fue el primer paro del año.
En 2020, la caída en la venta de boletos por las medidas de aislamiento profundizó la crisis del transporte. Las demoras en el pago de salarios derivaron en 64 días de paro de UTA, en reclamo por el pago de sus salarios. Es decir, hubo un día de paro cada cinco días y 18 horas. En 2019 hubo 14,5 días de paro: un promedio de un día de huelga cada 25 días.
Problema de fondo
“Este año la situación es peor”, explicó Luis García, miembro de la Asociación de Empresarios de Transporte Automotor de Tucumán (Aetat). El año pasado, las huelgas de los trabajadores del transporte público fueron superadas mes a mes con el pago de los salarios con los subsidios al transporte, tanto de Nación como de la Provincia, en concepto de compensación de tarifa. Este año, explicó García, el total de los subsidios no alcanza para cubrir el pago de los salarios.
“Venimos desde hace varios años solicitando medidas de fondo para el transporte y sólo recibimos parches. Si bien ahora con la llegada de los fondos de la Nación, que estaban demorados, podremos saldar los salarios, los subsidios ya no cubren la totalidad de los salarios”, planteó García. Y agregó: “considerando que el sueldo bruto promedio es $ 100.000 (de ahí se pagan las cargas sociales), como son $ 3.600 trabajadores la planilla mensual es de $ 360 millones. La Nación otorga por mes $ 146,4 millones, menos que el año pasado, y la Provincia otorga $ 82 millones al mes, al igual que el año pasado. No alcanza, entonces estamos peor que le año pasado”.
García relató que la situación ha empeorado porque el dólar oficial aumentó de $82 a $ 96 este año, la inflación del rubro rondó el 60% y el combustible volvió a aumentar: el litro de gasoil Euro 5 ronda los $ 75. Apuntó además a las inequidades con las firmas porteñas, que además de percibir más subsidios también reciben un subsidio al combustible.
“Necesitamos sentarnos con funcionarios de la provincia y del municipio para analizar cómo salir de esta situación. La fuente de ingresos ha caído porque la tarifa es fijada por el Estado y cayó la recaudación. Los subsidios en el global están en los mismos niveles que años anteriores. ¿Cómo hacemos? Pedimos, como hace años, una reunión con el Gobierno para buscar una solución de fondo”, finalizó García.