Gracias a un triunfo inédito, San Martín se metió de lleno en la pelea

Con una buena dosis de contundencia, San Martín venció por primera vez a domicilio a Chacarita, alcanzó a Tigre en la segunda colocación y volvió a mirar de cerca al líder Almirante

CADA VEZ MEJOR. Martínez es una garantía en la última línea de San Martín. CADA VEZ MEJOR. Martínez es una garantía en la última línea de San Martín. LA GACETA / FOTOS DE MATÍAS NAPOLI ESCALERO

Histórica e importante. Los dos adjetivos calzan a la perfección para describir la victoria 3-1 sobre Chacarita Juniors. Lucas Diarte y Emanuel Cuevas. Los dos nombres propios aluden a los principales artífices del triunfo que San Martín se llevó del partido homónimo del Gran Buenos Aires.

Los números ayudan a dimensionar este éxito de mediodía de domingo, más rotundo en el marcador que en el juego.

El “Funebrero” era una especie de “bestia negra” para el “Santo”, que jamás en su historia lo había superado a domicilio y que llevaba 23 años sin cantar victoria en choques entre sí.

La última vez: 1-0 en La Ciudadela en 1998, por el Reducido de la B Nacional. Los 11 enfrentamientos que siguieron se saldaron con cinco triunfos de “Chaca” y seis empates. Ayer, la “maldición” se cortó, y con una victoria inédita de visitante.

Hay más: los tres puntos dejan al equipo de Pablo De Muner igualado en 37 unidades y respirándole en la nuca al escolta Tigre. Y cuanto menos manteniendo la distancia previa con el líder de la Zona A Almirante Brown (39), que visita hoy a Nueva Chicago, y que recibirá a San Martín en dos semanas en Isidro Casanova.

¿Y más allá de las cifras, qué dejó este golpe en rodeo ajeno? “Era un triunfo que necesitábamos”, admitió De Muner a la salida del vestuario. Y agregó: “fue un partido muy difícil. Y parte de esa dificultad fue nuestra responsabilidad”.

Tal cual. Porque San Martín arrancó con todo y antes de los diez minutos ya estaba en ventaja con ese tremendo zurdazo al ángulo de Diarte tras un filoso centro atrás de Juan Imbert.

Sin embargo, inexplicablemente, se quedó. Se empecinó en llegar tocando por abajo, para chocar una y otra vez con la línea de cinco del equipo de Cristian Aldirico.

Ignacio Arce, se sabe, es un gran arquero con reminiscencias de Hugo Orlando Gatti. Incluso con mejor manejo con los pies, a pedir de las nuevas reglas. Suele jugar muy adelantado y esta vez lo pagó: tras comprometer con un pase a un compañero, vio cómo Luciano Perdomo metía un “golón” desde casi media cancha.

“Nadie es perfecto, lo único interesa es que ganamos”, señaló el capitán, todavía enojado consigo mismo por su falla, de la que se hizo cargo De Muner: “Soy yo el responsable, no “Nacho”, porque hizo lo que le pido y cuando uno pide estas cosas lo que hace es exponerlo”.

El 1-1 hizo delirar a esa decena de hinchas “caracterizados” que alentaron a Chacarita desde la azotea de una casa contigua, mientras comían un asadito. Y confundió a San Martín, que prácticamente no atacó durante el resto de la etapa e incluso estuvo groggy sobre el final.

De Muner supo aprovechar el intervalo. Porque insistió en volver a la consigna de atacar al espacio y estuvo rápido de reflejos: mandó a la cancha al “amnistiado” Cuevas y a Daniel González en lugar de Leandro Vella y Lucas Cano, de pobres desempeños.

Los sustitutos terminaron siendo un revulsivo. Diarte, cada vez un jugador más integral, vio picar a Cuevas a sus espaldas y lo asistió con un taco. El hombre a préstamo de Central Córdoba sacó un latigazo de zurda y 2-1.

Para evitar sustos de último momento, Daniel González realizó un centro preciso para que Cuevas sentenciara. Poco después, el árbitro Héctor Paletta lo castigó con la roja.

“Me equivoqué”, confesó el volante en relación a la expulsión que arruinó su mejor tarde. Primero se sacó la camiseta como descarga y más tarde se vio envuelto en una disputa con un rival. Una lástima para él y para el equipo.

Nada es perfecto. Aunque el paso de San Martín por el partido de San Martín casi que lo fue, al menos en los números.

RINCÓN "SANTO"

Rápido regreso

Luego del triunfo, los jugadores “santos” se ducharon en el estadio de Chacarita y viajaron rápidamente hacia el Aeroparque Jorge Newbery. A las 17.55 abordaron el vuelo que los depositó nuevamente en nuestra provincia.

Descanso

Hoy, el plantel gozará de una jornada libre. Mañana a las 9.30 en el complejo “Natalio Mirkin”, iniciará la semana de trabajo pensando en el duelo contra Nueva Chicago (el domingo desde las 21) por la fecha 23 de la Primera Nacional.

Almirante juega el clásico

Desde las 21.10, el líder Almirante Brown visitará a Nueva Chicago en una nueva edición del clásico. También jugarán: Instituto-Morón. Resultados de ayer: Mitre 0-Riestra 2, Independiente Rivadavia 1-Almagro 1, Atlético de Rafaela 0-Santamarina 1, Quilmes 1-Deportivo Maipú 0 y San Martín (SJ) 1- Villa Dálmine 0

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