“Golondrinas” habla de la explotación y el olvido

Brahim Carrillo partió de un hecho real para plantear una situación que se repite en el país.

“Golondrinas” habla de la explotación y el olvido

La historia de Walter Monzón atravesó el país dos veces: en enero de 2018, cuando se lanzó a las aguas del río Gastona para salvar a una niña de siete años que era arrastrada por la corriente; y 10 meses después, cuando se suicidó en Mendoza, al no poder soportar su difícil situación económica y estar lejos de su familia buscando alguna clase de trabajo.

A partir de este hecho, pero despegado de la anécdota puntual, Brahim Carrillo elaboró “Golondrinas”, el unipersonal que Fabio Velásquez estrenará a las 21 en La Gloriosa (San Luis 836). “Un trabajador. Un hombre simple que tiene la oportunidad de contar sus verdades, su historia que despertó el asombro de miles y el silencio de millones. Tenía el hábito de migrar a pesar de tener las alas y pies cansados en busca de una miga que, si la encuentra, tuvo suerte. Corrió, saltó, voló pero nadie le enseñó cómo caer entre las situaciones cotidianas de explotación y atropello”, adelanta el director.

- ¿Quién es el personaje?

- La obra habla sobre un héroe, está basada en el hecho real de un humilde trabajador. Todo el país habló de su persona, le hacía entrevistas y hasta le regalaron un viaje a Mar del Plata. Pero nadie solucionó sus problemas reales. Fue utilizado como un juguete mediático. Solo fue usado contenido para cubrir un horario televisivo.  

- ¿El desarraigo como obrero golondrina que siente es también interno?

- El desarraigo es una situación constante que se vive con la melancolía de no pertenecer a ningún lugar, de no ser parte de una sociedad en concreto. El desarraigo es físico y emocional. Los golondrinas son parte de nuestra cultura, Tucumán se construyó con trabajadores que venían desde provincias y países vecinos para trabajar la zafra. Al día de hoy, Tucumán se convirtió en uno de los exportadores por excelencia de personas que debido a la falta de oportunidad se ven en la necesidad de irse, escaparse de una tierra seca que no tiene espacio para sus propios hijos.

- ¿Cuáles son las verdades que cuenta la obra y por qué nos asombrarán, según tu sinopsis?

- La Argentina se encuentran en una contradicción: forma y fomenta la educación gratuita pero expulsa a sus habitantes de su país. Tucumán no es la excepción, muchos en algún punto pensamos en irnos o lo hacemos por sentirnos expulsados. Pero,  ¿qué pasa cuando tenés una cámara al frente, cuándo tenés la posibilidad de cambiar tu vida por un acto heroico, cuando te habla hasta el presidente (Mauricio Macri) para felicitarte y luego todo resulta ser una mentira? Esta historia de final trágico nos revela que, a veces, lo que creemos tan firme, tan grande, tan importante e imprescindible, pude ser simplemente una ilusión.

- ¿Podía eludir su destino?

- En su humildad, nuestro héroe no advirtió el engaño y creía que esto podría durar. No pudo advertir el juego mediático que supuso su acto noble o su locura.

- ¿Cómo fue el proceso creativo?

- Hicimos una investigación antropológica sobre la situación de los trabajadores golondrina en nuestra provincia, lo que atraviesan al ser expulsadas familias enteras para ir a trabajar en la cosecha de la uva, la manzana y otras. Ensayamos durante seis meses en conjunto con un equipo compuesto por un actor, una dramaturgia, un músico, un director y dos productores. Este proceso busco ser plenamente interdisciplinario para generar visiones desde cada uno de los campos involucrados.

- El año pasado se estrenó una película homónima, ¿tiene algún punto en contacto?

- Evidentemente es una temática que a los artistas nos atraviesa, si bien no tiene ningún punto de contacto más que la temática general. Es un tema de mucha sensibilidad que nos rodea y merece ser puesto en escena.

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