La polémica que ha estallado en torno del fallido diagnóstico de coronavirus que recibió el candidato a senador nacional de Fuerza Republicana, Ricardo Bussi, está lejos de aquietarse. Legisladores de otros sectores de la oposición han fustigado severamente a su par de republicano, quien contestó con no menos virulencia a los cuestionamientos.
“Es asombroso como los socios políticos del peronismo se ponen en consonancia para atacarme y tratar de desprestigiarme”, respondió el presidente de FR. Se refirió, con esa chicana, al legislador alfarista Walter Berarducci, del Partido de la Justicia Social, y al líder de Libres del Sur, Federico Masso, candidato a senador nacional por el Frente Amplio por Tucumán.
La madeja de este incidente comenzó el martes pasado, cuando Bussi fue internado en un sanatorio privado de la capital por una presunta descomposición. En ese centro médico le realizaron un test rápido que dio positivo. Ese resultado generó repercusiones de toda índole. La actividad parlamentaria se vio compromedita durante la semana porque se resolvió desinfectar el edificio y sólo se dejaron guardias esenciales para garantizar compromisos impostergables, como audiencias testimoniales de la comisión de Juicio Político. Como si las consecuencias institucionales no bastarán, la cuestión reverberó directamente en la campaña electoral: el miércoles, Josefina Bussi, hija menor y candidata a diputada en primer término por FR (encabeza la lista tras la renuncia de la legisladora Nadima Pecci), se excusó de participar en el debate de postulantes organizado por LA GACETA porque era “contacto estrecho” de su padre y estaba obligada, por prescripción médica, a permanecer aislada durante una semana. Sin embargo, el jueves, un análisis de PCR procesado por el Sistema Provincial de Salud arrojó que el legislador no tenía coronavirus.
En este contexto, mientras Bussi denunciaba que el peronismo intentaba “sacarlo de la cancha”, otros legisladores opositores cuestionaban al líder de FR. “Lo único que me queda es vergüenza, bochorno y un rechazo absoluto de jugar con algo que es tan sensible para los que hemos padecido (la enfermedad), para familiares de los fallecidos y para la comunidad en general; es una falta de respeto a la humanidad”, fustigó Berarducci. “Bussi actuó con enorme irresponsabilidad”, sentenció Masso.
“Si un centro de salud me diagnostica positivo para covid-19 y después un PCR del Siprosa da negativo, ¿cuál fue mi error?”, planteó Bussi
“Berarducci que dice respetar la vida, cae en la ironía de acompañar a su patrón a los actos multitudimarios, cuando la tan temida variante Delta ya está circulando en Tucumán. Evidentemente los socios de Manzur deben estar inmunes a estos virus”, manifestó el titular de FR.
“Del legislador Masso, alperovichista y servil al peronismo no me sorprende nada. Todavía estoy esperando que vaya a la justicia a denunciarme ya que según él, me vió salir con bolsones llenos de dinero de la Casa de Gobierno”, desafió.
“Toda esto confirma lo que sostenemos: un pacto entre Juan Manzur, Germán Alfaro y su socios para sacar de la cancha al único partido que representa la opción no peronista”, concluyó.