Josué David Rubio fue sentenciado a 13 años y ocho meses de cárcel, a través de un juicio abreviado impulsado por el Ministerio Público Fiscal. Se lo declaró culpable de cuatro hechos ocurridos en mayo del año pasado, contra mujeres a las que les robó utilizando armas de fuego. Había efectuado disparos contra dos de ellas.
Al hombre de 20 años se le atribuyeron cuatro hechos cometidos los primeros días de mayo, en los cuales empleó armas de fuego para desapoderar a las víctimas de sus bienes, llegando a disparar contra dos de ellas.
El peligroso delincuente fue sentenciado a 13 años y 8 meses de prisión de cumplimiento efectivo, pena acordada por su abogado defensor y el fiscal Ramón Enrique Rojas, por ser considerado autor penalmente responsable de los delitos reiterados de robo agravado por el uso de armas de fuego y portación ilegal de armas de fuego de uso civil.
Los términos del convenio arribado entre las partes, que contó con el consentimiento de las víctimas, fueron expuestos por el auxiliar de fiscal Pedro Landivar. El representante del MPF hizo un relato pormenorizado de los hechos endilgados a Rubio, así como las evidencias colectadas por la fiscalía con las cuales logró acreditar la acusación.
En su resolución, el juez interviniente hizo lugar a la aplicación del procedimiento abreviado y ordenó el traslado del condenado a la Unidad Penitenciaria Nº V de Villa Urquiza.
“Se trata de hechos sumamente graves, donde el acusado mostró desprecio total por la integridad física de las víctimas, que en todos los casos fueron mujeres”,
Cabe destacar que el pasado mes de abril, Carlos “Savora” Villagra, cómplice del imputado, fue condenado a 13 años de prisión por este caso.
La causa
El primer hecho que se le imputó fue cometido el 1 de mayo de 2021, en el barrio Colón de la ciudad de Aguilares, cuando abordó a una mujer que ingresaba en su domicilio. Tras amenazarla con una pistola, le sustrajo un celular.
El 3 de mayo de 2021, alrededor de las 18.30 horas, Rubio y su cómplice circulaban en una moto cuando se detuvieron frente a una cancha de fútbol 5 ubicada en calle Las Heras al 100 de la ciudad de Concepción. Allí abordaron a una de las empleadas del local, a la que amenazaron con una arma de fuego con la cual efectuaron disparo en la mesa donde se sentaba. Luego levantaron de la misma una mochila que en su interior contenía dinero, para luego darse a la fuga.
Media hora más tarde, el imputado protagonizó el el tercer hecho, esta vez en la puerta de un gimnasio del barrio Alvear de la ciudad sureña. Cuatro mujeres se encontraban en la vereda de dicho local cuando fueron interceptadas por los individuos que las amenazaron con las pistolas y realizando disparos. Uno de los proyectiles, que salió del arma que portaba Rubio, impactó en la pierna de una de las mujeres. Tras ello procedieron a sustraer los teléfonos celulares de las víctimas y una mochila que contenía dinero en efectivo.
El 4 de mayo tuvo lugar el cuarto hecho. Una mujer circulaba caminando por calle Avellaneda, cuando al llegar a intersección con calle Dall’Asta fue sorprendida por los sujetos en moto. Rubio, que iba de acompañante, descendió del rodado y apuntando con un arma a la víctima, le exigió la entrega de sus pertenencias. Ante la negativa de esta, le efectuó un disparo en la pierna izquierda a la altura de la cadera.