Suecia: la centroizquierda retendría el Gobierno, pero crecen la derecha y la ultraderecha

Los comicios se dieron en un clima de tensión, debido al alto índice de inflación, al aumento de la criminalidad y a la futura adhesión del país a la OTAN.

COMICIOS EN SUECIA. La centroizquierda retendría el Gobierno, pero crecen la derecha y la ultraderecha. COMICIOS EN SUECIA. La centroizquierda retendría el Gobierno, pero crecen la derecha y la ultraderecha.
11 Septiembre 2022

La centroizquierda gobernante en Suecia se perfilaba para retener el poder, en unas ajustadas elecciones generales, según encuestas de boca de urna. Los comicios se da en un clima de tensión, debido al alto índice de inflación, al aumento de los casos de criminalidad y a la futura adhesión del país a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

El bloque, encabezado por la primera ministra socialdemócrata Magdalena Andersson, obtendría entre un 49,8 y el 50,6% de los votos, mientras la derecha y la ultraderecha reunían, juntas, entre un 48% y un 49,2%, según sondeos de boca de urna divulgados por las televisión.

El partido Demócratas de Suecia (SD), de extrema derecha, alcanzaría un nuevo máximo histórico de entre un 20,5% y un 21,3%, de acuerdo con esas encuestas, con lo que se convertiría por primera vez en la segunda fuerza.

Si se confirman estos guarismos, la coalición de centroizquierda conseguiría 176 bancas en el parlamento, con lo que superaría la mayoría absoluta de 175, mientras el bloque de derecha y ultraderecha reuniría 173 escaños.

En las legislativas de 2018, SD logró un 13%, que le alcanzó para convertirse en el tercer grupo más grande del Riksdag (parlamento sueco). Las encuestas de intención de voto presagiaban que mejoraría el resultado.

Anteayer, un sondeo de Novus auguraba al Partido Socialdemócrata Sueco (SAP) un 30,3%, y al SD, un 21,2%.

El Partido Moderado (centroderecha), de Ulf Kristersson, se situaba tercero, con un 17,1%, y no se descarta que estos decidan aliarse esta vez con la ultraderecha.

Andersson tenía expectativas de estirar cuatro años su mandato, si alcanzaba los votos con el apoyo de partidos verdes y de izquierda, a los que cuenta como aliados.

La campaña estuvo dominada por temas en principio favorables a la oposición de derecha, como la criminalidad, los problemas de integración de los migrantes y la disparada del precio de la energía.

La popularidad de Andersson, con un índice de confianza superior al de Kristersson, así como el temor de los electores centristas de ver a la ultraderecha en las esferas del poder, podrían inclinar la balanza a favor de la centroizquierda.

Además de un Parlamento de 349 escaños, el Riksdag, los suecos elegían hoy 20 consejos regionales y 290 consejos municipales.

Suecia acude a las urnas cada cuatro años, y los comicios siempre se celebran el segundo domingo de septiembre.

Se esperaba que unos 7,5 millones de electores -sobre 10,3 millones de habitantes- acudieran a votar, aunque la elección había empezado con el voto anticipado.

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