Esta semana, el Ministerio de Economía nacional, a cargo de Luis Caputo, llevará a cabo una licitación para renovar aproximadamente $7 billones en vencimientos, en lo que se considera el mes más desafiante del año para el Tesoro durante la gestión de Javier Milei

La operación se enmarca en un contexto donde el stock de títulos públicos en moneda local ha alcanzado niveles no vistos desde antes de la crisis de 2018.

Tras la transferencia de pasivos del Banco Central (BCRA) al fisco, el stock de deuda, medido al dólar contado con liquidación (CCL), ha crecido a un pico significativo. Esto ha llevado a analistas a señalar que el "rollover" de esta deuda sigue dependiendo del cepo cambiario, consignó el diario "Ámbito".

Los funcionarios de la Secretaría de Finanzas, liderados por Pablo Quirno, están afinando los detalles de la subasta, cuyo anuncio se realizará este martes. La licitación está programada para el jueves y se liquidará el lunes 30 de septiembre, día en que vencerán alrededor de $7 billones en deuda. Esto incluye una Lecap (letra capitalizable a tasa fija) de $6,78 billones, más de $300.000 millones en el bono dólar "linked" T2V4, y otros compromisos menores.

Con esta operación, se completará un calendario de vencimientos en septiembre, que asciende a más de $14 billones, convirtiéndolo en el mes más cargado del año en cuanto a pagos de deuda en pesos. Antes de la subasta anterior, Luis Caputo había señalado la posibilidad de una refinanciación parcial, aunque finalmente se decidió por una leve suba de tasas para evitar complicaciones.

Los vencimientos de corto plazo que enfrenta Finanzas son en gran medida una herencia de la transferencia de deuda desde el Banco Central al Tesoro, un proceso que buscó eliminar la emisión endógena por el pago de intereses. Esta migración culminó en julio con el lanzamiento de las LEFI.

Un informe de la consultora 1816 evaluó la situación de la deuda pública en pesos a partir de datos del Ministerio de Economía hasta agosto. El reporte destaca que el stock de títulos en pesos se ha reducido, tanto en términos reales como en dólares oficiales, desde los máximos de 2023. Sin embargo, al medirse en CCL, el stock asciende a casi U$S90.000 millones, el nivel más alto desde la corrida cambiaria de 2018.

Este contexto presenta un desafío para la administración de Javier Milei, especialmente, ante un posible levantamiento de las restricciones cambiarias; mientras que el Banco Central reporta reservas netas negativas entre U$S5.000 millones y U$S5.800 millones.

La consultora Eco Go, dirigida por Marina Dal Poggetto, enfatizó que el mercado de crédito en pesos sigue dependiendo del cepo. En su análisis, señaló que la deuda en pesos ha vuelto a niveles similares a los de noviembre, antes de la devaluación. A pesar de que los flujos corrigen, los stocks continúan generando presión.

Un punto a favor en comparación con la era Macri es que más del 60% de los títulos en pesos está en manos de bancos, lo que limita la capacidad de estos para desprenderse de los bonos y dolarizarse debido a restricciones regulatorias.

La consultora 1816 advirtió que el sistema financiero actúa como intermediario entre los depositantes y el Tesoro, lo que significa que los ahorristas tienen la opción de rescatar su dinero y buscar refugio en el dólar. 

Según su estimación, el total de pesos en manos del sector privado, al valor del CCL, ronda también los U$S90.000 millones (U$S120.000 millones al oficial).