Por Gustavo Rodríguez
05 Febrero 2024
PREPARADOS. El jefe de Policía Joaquín Girveau confirmó que se extremaron las medidas de seguridad para proteger a todas la partes. La Gaceta / foto de Analía Jaramillo
Llegó la hora de la verdad. Será un debate en el que estará en juego algo más importante que una condena o una absolución. Miguel “Miguelón” Figueroa, el señalado como autor de amenazas en contra de testigos y de dos fiscales, será enjuiciado por doble homicidio y por haber herido a otras tres personas, una de ellas, un niño de 12 años. Se sabrá también si el supuesto plan que habría puesto en práctica para atemorizar dio buenos resultados.
El hecho por el que enfrenta a un tribunal se registró en diciembre de 2020. Está acusado de haberse presentado en Blas Parera al 500 junto a otras tres personas (que nunca pudieron ser identificadas) y disparar contra un grupo de gente. Por el ataque, perdieron la vida Héctor Gabriel Amaya (33), Leonardo Sepúlveda (26) y resultaron heridos Gonzalo Greco (12), Maximiliano Limdon (19) y Franco Galván (26).
A lo largo de la historia judicial de la provincia, hubo muchos debates como este o más graves. Sin embargo, el que comenzará hoy tiene una arista única. Nunca antes un imputado con vínculos narcos había intentado amenazar a las personas que lo pueden complicar procesalmente y a los fiscales que tendrán la misión de acusarlo. El caso generó una polémica en el Poder Judicial. El Ministerio Público fiscal pidió la suspensión de este juicio y del que está programado que comience el 26 de febrero, por otro homicidio, argumentando que no estaban dadas las condiciones de seguridad.
Después de la intervención del gobernador Osvaldo Jaldo, que fijó postura, el Colegio de Jueces rechazó el pedido y el debate comenzará tal como estaba previsto. El tribunal estará integrado por María Alejandra Balcázar, Eduardo González y Rodoldo Norniella Parache.
“Las medidas de seguridad ya están tomadas. Está todo organizado para el traslado del acusado y se hará un operativo especial para que tampoco haya incidentes entre los familiares. No vamos a tolerar ningún problema y, el que los genere, terminará preso”, advirtió el jefe de Policía, Joaquín Girveau.
Estrategias
“Estuve con él y le anticipé que su situación es muy complicada”, aseguró Macario Santamarina, defensor de “Miguelón”. “Por todo lo que pasó, tendré que cambiar la estrategia defensiva. Ahora tendré que hacer hincapié que él no fue el autor de las amenazas, porque ese tema lo deja muy mal parado ante el tribunal”, añadió.
Santamarina insistió en que Figueroa negó haber sido el autor de ese mensaje intimidatorio. “Lo conozco y tiene la suficiente inteligencia para no hacer algo tan lamentable. Las amenazas las pudieron haber hecho hasta sus propios enemigos para perjudicarlo procesalmente. Lamentablemente, no hay tiempo para que se compruebe que él no es el autor de ese mensaje”, indicó el profesional en una entrevista con LA GACETA.
El defensor reconoció que hasta antes de que surgieran las amenazas, la situación era favorable para su defendido. “No había demasiados elementos en su contra y sólo quedaba escuchar los relatos de los testigos que fueron cambiando a lo largo del proceso”, indicó Santamarina, que adelantó que solicitará su absolución.
¿Todo listo?
“Creemos que tenemos todos los elementos suficientes para demostrar que Figueroa fue el autor de este cruento ataque. Por eso solicitaremos que se lo condene a perpetua”, indicó el fiscal Carlos Sale. “Pero un juicio es un juicio y hay que esperar su desarrollo para estar mucho más seguros”, añadió el acusador.
El miedo de los testigos es el obstáculo que tiene Sale en estos momentos. Según la información a la que accedió LA GACETA, hay tres de ellos que no estarían convencidos de repetir la declaración que hicieron en la etapa de instrucción del expediente. También hay otros dos que hasta el viernes no pudieron ser ubicados para cumplir con su obligación cívica. Está seguro el testimonio de uno de los sobrevivientes porque se encuentra detenido por una causa de robo, aunque nadie puede asegurar qué dirá en la audiencia.
“Los testigos están protegidos desde hace varios días. Es más, reforzamos su vigilancia por el hecho que todos conocen. Y los que no aparezcan, nos encargaremos de buscarlos, encontrarlos y llevarlos, tal como nos obliga la ley”, informó Girveau.
Antecedente
El miedo de los testigos a declarar en contra de “Miguelón” no es nuevo. Este problema ya quedó claro en otro crimen, el de Ramiro Ledesma (18), ocurrido el 13 de marzo de 2021 y por el que también será juzgado Figueroa a partir del 26 de febrero.
Por ese homicidio, mientras el supuesto narco se encontraba prófugo, Alexis “El Sucio” Íñigo fue detenido, procesado y juzgado. Un tribunal lo encontró penalmente responsable y otro juez le impuso la pena de prisión perpetua.
Sin embargo, el defensor oficial Pablo Canatta apeló la sentencia. A su criterio, Íñigo había sido condenado por el testimonio de una persona que en la etapa de instrucción había declarado que no estaba en condiciones de identificar al autor y que durante el debate sí lo reconoció. Un tribunal de impugnación le dio la razón y, además de absolver por el beneficio de la duda, dispuso su libertad.
El fiscal Ignacio López Bustos decidió llevar el tema a la Corte Suprema de Justicia de la provincia. Allí argumentó que impugnación no había tenido en cuenta el evidente temor que tenía el testigo a sufrir represalias en un primer momento y que después, al comprobar que su vida no corría peligro, dijo toda la verdad. El máximo tribunal le dio la razón al representante del Ministerio Público. Anuló la sentencia, ordenó que se hiciera un nuevo juicio y dispuso la inmediata detención de “El Sucio”.
La otra causa: analizarán los chips y las tarjetas de memoria secuestradas al acusado
Mientras se desarrolla el debate, la Unidad Fiscal Regional que en estos momentos está siendo subrogada por la fiscala Mónica García de Targa, continúa avanzando con la investigación de la causa por amenaza en contra de testigos y dos fiscales, en la que está señalado Miguel “Miguelón” Figueroa, como posible autor y el ministro de Seguridad Eugenio Agüero Gamboa y el Director del Servicio Penitenciario Antonio Quinteros, por incumplimiento a los deberes de funcionario público.
Los tres chips y las dos tarjetas que fueron secuestradas por las autoridades en la celda del supuesto narco serán analizadas por los peritos del Equipo Científico de Investigación Fiscal. Legalmente, un recluso puede contar con un celular, pero tiene horarios para ser utilizado. Además, el aparato debe estar perfectamente registrado, al igual que la línea que tiene.
Las autoridades sospechan que “Miguelón” podría haber colocado los elementos secuestrados para realizar las amenazas y cometer otros ilícitos desde el penal de Villa Urquiza. Los investigadores de las fuerzas nacionales que luchan contra el narcotráfico están muy interesados en conocer la información que de allí se extraiga.
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