Atlético Tucumán quiere un San Valentín reconciliatorio

No son días sencillos para Atlético. El comienzo del 2024 fue muy distinto de lo que se esperaba, e incluso, de lo que se había visto en los amistosos de pretemporada. El equipo no encuentra el rumbo, y hasta ahora, apenas cosechó dos puntos de 12 posibles en las primeras cuatro fechas de la Copa de la Liga, producto de dos empates y dos derrotas, donde además, apenas pudo convertir un tanto, y recibió seis. El plantel y el cuerpo técnico se mostraron ya bastante golpeados por la situación, y justo hoy, un 14 de febrero, el día de San Valentín, buscarán volver a enamorar una hinchada que, cada vez más, empezó a alejarse del equipo, y a expresar su descontento.

La situación parece estar en un punto límite. La llegada de Favio Orsi y Sergio Gómez, a mediados del año pasado, encendió la ilusión en algunos hinchas, que miraron con buenos ojos la designación de la dupla. Y los resultados, durante el primer tramo de su ciclo, ilusionaron bastante, pese a que, desde el juego, todavía faltaban pulir algunos aspectos. Sin embargo, el cierre del 2023, con la derrota 0-2 ante Huracán, terminó siendo un baldazo de agua fría, y un trago bastante amargo para un pueblo “decano” que estaba muy ilusionado con volver a una competencia internacional, y que, justamente, por ese traspié, no lo pudo hacer. 

Tras ese partido, también producto de los resultados previos (Atlético perdió tres de los últimos cuatro partidos del torneo pasado), la opinión sobre el cuerpo técnico empezó a estar más dividida; aquellos que fueron más escépticos al momento de la llegada de la dupla, empezaron a mostrar su descontento con el nivel del equipo, aunque todavía había una banca importante para Orsi y Gómez, de cara al 2024.

Sin embargo, el arranque de temporada esquivo empezó a tensar aún más el ambiente. Tras el final del primer partido del torneo, ante Rosario Central, que fue empate 1-1, hubo un acompañamiento bastante general al equipo, con aplausos. Tras el cierre del duelo de la tercera fecha, ante Argentinos Juniors, la despedida fue más variada; hubo muchos silbidos para un equipo que volvió a empatar, y que llegaba de una dura derrota ante Instituto en Córdoba.

Luego de un nuevo mal partido como visitante, ante Barracas Central, el ambiente parece estar más cargado que nunca. En redes sociales, explotaron los mensajes en contra de dirigencia, jugadores y cuerpo técnico, y se espera que ese descontento se traslade hoy a las tribunas del Monumental José Fierro, en lo que puede ser un partido clave para el futuro “decano”, y sobre todo, para el de Orsi y Gómez.

Por supuesto, los protagonistas buscarán revertir la historia, y comenzar un camino de redención con la hinchada, y con la propia identidad que intentaron adquirir en este comienzo de año. El escenario no es el ideal, claro, y no sólo por el clima que reina en 25 de Mayo y Chile, sino por lo estrictamente futbolístico. El calendario le deparó al “decano” uno de sus duelos más complicados de todo el campeonato, sino el más difícil: River. Un rival que no es duro solamente por lo que representa históricamente, sino por su actualidad. El “millonario”, que atravesó algunos momentos de zozobra durante 2023, el primer año de Martín Demichelis al frente del equipo, llega en un gran momento: tras empatar en su debut en la Copa de la Liga (1-1 ante Argentinos Juniors), ganó los tres cotejos que le siguieron, sin recibir goles, y mostrando una superioridad importante con respecto a sus rivales, sobre todo en los últimos dos partidos: 5-0 a Vélez y 3-0 a Deportivo Riestra. 

Desde lo colectivo, Demichelis pareció encontrarle la vuelta a un plantel no tan largo, pero con nombres de mucha jerarquía, y con juveniles que se muestran cada vez mejor. Y desde lo individual, también aparecieron grandes rendimientos: tal es el caso, por ejemplo, de la dupla de ataque, Facundo Colidio y Miguel Borja, que convirtieron ocho de los 11 goles que anotó el equipo de Núñez en esta Copa de la Liga. Pese a que Demichelis realizaría algunos cambios, teniendo en cuenta la cercanía de este partido con el que jugó ante Riestra, el pasado domingo, ambos delanteros serían titulares.

¿A qué apostará Atlético para tratar de sacar un resultado positivo, y tratar de reencauzar el rumbo? Primero, a algunos cambios en el equipo. Uno de ellos, obligado: Francisco Flores ocupará el lugar del expulsado Nicolás Romero en la zaga central. Además, habría, por lo menos, una o dos variantes más en el “11”: Mateo Coronel, Nicolás Castro y Renzo Tesuri son los que más chances tienen de dejar la titularidad, y quienes podrían ingresar en su lugar son Mateo Bajamich, Sergio Ortiz y Agustín Lagos. Además, también se baraja la posibilidad de que Juan Infante reemplace a Matías Orihuela en el lateral izquierdo. Sin embargo, todo esto se terminará de confirmar esta noche, ya que el equipo, ayer, en su último entrenamiento, no hizo práctica de fútbol formal, sino que hizo táctico.

Otro punto que buscará corregir Atlético esta noche serán los errores propios. Casi todos los goles que recibió en el torneo llegaron por desatenciones defensivas, o equivocaciones muy puntuales, y eso es algo que buscará evitar hoy. “Es un partido que necesita de una concentración altísima, y prestarle atención más que nunca a los pequeños grandes detalles”, indicó Orsi, ayer, en una entrevista radial, anticipando además que buscará un equipo  “muy ordenado a la hora de no tener la pelota, e intentar ser aventurero a la hora de tenerla”.

Hay, si se quiere, dos datos que pueden encender una pequeña ilusión en el pueblo “decano”. Por un lado, su historial reciente con River: en Tucumán, el “millonario” lleva cuatro partidos sin ganar (una derrota y tres empates). La última vez que se llevó los tres puntos a Buenos Aires fue en marzo de 2019, cuando se impuso 1-0. Ypor otro, un dato más de color: Atlético nunca perdió jugando un 14 de febrero: dos victorias (una sobre Boca, en 2016) y dos empates. Más allá de esto, jugadores y cuerpo técnico buscarán darle una alegría a su gente, en el día de los enamorados, para empezar a recuperar una relación que no atraviesa su mejor momento.