Por Agustina Garrocho
12 Mayo 2024
AUTORRETRATO. Verónica Corrales y Fernando Galucci se pintaron a sí mismos haciendo un mural en esta obra.
En una calle de tierra, dos personas en una moto compran algodón de azúcar a un vendedor ambulante. Una familia se refresca del calor en una pelopincho en la vereda; tras ellos, en la pared rosa de una fachada conviven pintadas del Gauchito Gil y el nombre de un candidato.
Estas escenas están retratadas en dos de las nueve pinturas del grupo RUIDO, integrado por los artistas tucumanos Verónica Corrales y Fernando Gallucci y son expuestas en el Museo de Arte Contemporáneo de La Boca (MARCO).
En ese espacio del mítico barrio porteño, las obras se incluyen en la muestra “La Función de la Utopía”. RUIDO tiene una trayectoria en el muralismo callejero y con esta exhibición invierten la lógica trasladando lo urbano a las salas: “con los murales construimos un museo a cielo abierto, con esta obra llevamos la esencia de la calle al museo”, sostienen. La pareja de artistas plásticos y audiovisuales completan la obra con un sonido ambiente que parece tomado de una metrópoli norteña.
“VEREDEANDO”. Retrato de una familia disfrutando de una pelopincho.
El grupo empezó a pintar murales en 2020 y desde ese momento hasta hoy llevan realizadas más de 80 obras en distintas ciudades del NOA. Durante sus jornadas de trabajo tomaron fotografías del entorno que los rodeaba y que se transformaron luego en las obras de pequeño formato que se exponen hasta el 28 de julio en La Boca.
“Estas obras muestran a personajes icónicos o espectros urbanos de la provincia, retratados junto a nuestros murales”, dice Verónica. “En el paisaje sonoro que acompaña a las obras se pueden oír varias ‘capas de tucumanidad’: vendedores ambulantes, aerosoles, conversaciones dispersas, mosquitos, autos, motos, singles de propagandas políticas, etcétera. Es el detrás de escena de lo que conlleva la realización de una obra mural”, manifiesta.
La exposición, curada por Cecilia Quinteros Macció, incluye una prestigiosa selección de obras de la Fundación Tres Pinos con autores como Antonio Berni, Lino Eneas Spilimbergo, Carlos Alonso, Eduardo Audivert, Marcia Schvartz, Luis Felipe Noé, Josefina Robirosa; junto a consagrados tucumanos como Osorio Luque, Demetrio Iramain y Gabriel Chaile.
Con estos autores conviven además obras de potentes artistas contemporáneos de la provincia de Tucumán: Eugenia Correa, Sandro Pereira, Carlos Alcalde, Alfredo Frías, Valeria Maggi, Nelson Velárdez Lai, Lautaro Sotelo, María Rosa Mamana y Emiliano D’Amato Mateo.
La coleccionista de arte Alicia Teruel, la curadora Cecilia López Macció y Ricardo Cadenas, el director de la Fundación Tres Pinos en la inauguración de la muestra
“Tomé como base el hecho de que en la colección de la Fundación Tres Pinos había una importante presencia de arte tucumano -dice la curadora-. Y de maestros que han estado en la provincia y que de alguna manera han atravesado la historia del arte en la provincia”.
Quinteros Macció se refiere principalmente a Spilimbergo, quien era pintor y fue el primer maestro del Instituto de Arte de la provincia, que luego se convirtió en la Facultad de Artes de la UNT. A partir de ese disparador, la curadora elige mostrar a través de la pintura lo que ella llama las “distintas versiones de la utopía”.
EN EL MARCO. Expositores tucumanos en la inauguración de “La Función de la Utopía”.
Mundos diferentes
“La utopía es la necesidad constante de crear mundos diferentes al mundo en el que vivimos y eso es lo que motoriza al arte -asegura-. En Tucumán, el arte que se produce está lleno de ese deseo de transformación: hay una necesidad de movernos del lugar en el que estamos, una necesidad de un pensamiento crítico constante”.
Para la curadora, los artistas de la provincia seleccionados buscan un arte que los represente como tucumanos y en este sentido la obra de RUIDO es fundamental: “Lo que ellos hacen también habla de identidad, de una crítica, porque por ejemplo tapan las pintadas políticas con sus murales y muestran otra parte del paisaje urbano”.
“Para nosotros, la utopía es la esperanza de un futuro mejor, es la fuerza que nos impulsa a imaginar y a trabajar por un mundo más equitativo, inclusivo y armonioso”, asegura Corrales. Y agrega: “Estamos mostrando una realidad alternativa, una forma diferente de ver y experimentar el mundo que nos rodea. Nos interesa rescatar la identidad cultural y el espacio público frente a la invasión de la publicidad y la propaganda política, el abandono y el vandalismo”.
La exposición puede visitarse en el MARCO, Almirante Brown 1.301, en La Boca, Buenos Aires. La muestra se encuentra abierta de miércoles a domingo de 11 a 19.
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