“Apelmazado” es la descripción que le da nombre al chipá, una masa condensada de queso y harina que al partirla desprende tiras de este lácteo derretido, así como un sabor intenso. Con algunos retoques puede resultar además un aperitivo bajo en carbohidratos y sumamente saludable.
El chipá es un preparado propio de Latinoamérica que en el litoral de nuestro país forman parte de las meriendas y las horas de los mates. Calentitos y llenos de sabor, son una gran compañía del café de las mañanas. Adopta distintas formas, a veces es una bomba pequeña saborizada y otras una especie de rosca alargada que puede incluso comerse por partes.
El origen del chipá, un aperitivo que trasciende el tiempo
Su nombre surge del quechua para describir su estructura condensada y un tanto irregular. Este se prepara con almidón de mandioca (yuca) que utilizaban los indígenas guaraníes para hacer este pan. Estos rallaban la mandioca cruda que se cocinaba envuelta en hojas de güembé (maíz) sobre tanimbu (ceniza). Al calentarse este almidón se vuelve pegajoso, característica que hace a su emblema.
Sin embargo, el chipa puede ser un tanto calórico debido a sus altos contenidos de harina refinada. Pero con unos cuantos retoques podemos hacer un postre bajo en hidratos de carbono y sumamente delicioso.
¿Cómo hacer el chipá saludable sin harina?
Ingredientes
- 2 huevos chicos
- 1 taza leche en polvo descremada
- 4 cucharadas queso en hebras light
- Pizca polvo para hornear
Elaboración
1. Mezclar los huevos con el polvo para hornear
2. Agregar la leche en polvo y mezclar muy bien, hasta que se integre todo.
3. Incorporar el queso rallado y llevar a heladera por 30 minutos aproximadamente.
4. Una vez transcurrido el tiempo, armar bollitos con una cuchara de la mezcla y colocarlos en una fuente previamente engrasada o de silicona.
5. Llevar a horno a temperatura moderada. Debemos estar pendientes ya que se cocinan bastante rápido, entre 5-10 minutos. Una vez dorados los debemos sacar. y listo, así de fácil tenés esta receta sana e ideal para acompañar el mate.