El Ministerio Público Fiscal investiga a un hombre bajo sospecha de haber provocado la muerte de su madre. Por el momento, fue imputado por el delito de abandono de persona agravado por el resultado muerte de la víctima y agravado por el vínculo, y sometido a 60 días de prisión preventiva. Los investigadores no descartan la posibilidad de que a futuro la calificación legal se modifique a una más gravosa.
Durante una audiencia quedó al descubierto el tormento que vivió María Elena Giménez, una mujer de 77 años, en manos de su hijo Abraham Sucar (39). La víctima falleció luego de haber estado internada más de 40 días debido a múltiples lesiones en su cuerpo.
La investigación en contra de Sucar se inició a raíz de una denuncia realizada por la empleada doméstica de la víctima el pasado 15 de mayo en la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) acusando al hombre de maltratar física, verbal y psicológicamente a su madre.
A partir de la denuncia, el 16 de mayo un perito médico del Poder Judicial se dirigió al domicilio en el que vivía la víctima junto a Sucar, ubicado en Laprida al 400. Luego de realizarle una evaluación médica y tras recibir una orden del juez de familia y sucesiones, Fernando Gramajo, la mujer fue internada en el hospital Centro de Salud con un cuadro de salud delicado debido a que presentaba múltiples traumatismos en diferentes zonas de su cuerpo y a que estaba bajo un estado de deshidratación y desnutrición severo. La mujer permaneció allí internada hasta que murió el 27 de junio por una falla multiorgánica.
Al comienzo la investigación estuvo a cargo de la Fiscalía de Violencia de Género que conduce la fiscala Adriana Reinoso Cuello; después del fallecimiento de la víctima, el expediente pasó a manos de la Fiscalía de Homicidios I, de Pedro Gallo. Los investigadores tomaron declaraciones al círculo cercano de la mujer y realizaron diversas pericias en el departamento donde vivían ambos. Fue así que lograron recolectar las evidencias suficientes para solicitar la detención de Sucar, quien se encontraba prófugo de la Justicia. La medida fue llevada a cabo el jueves 18 de julio por un equipo de la División de Homicidios, supervisados por los comisarios Juana Estequiño y Miguel Carabajal.
Ayer, la auxiliar fiscal de feria, Luz Becerra, formalizó la investigación y la imputación de cargos en su contra. Según su acusación, Sucar puso en peligro la vida de su madre “al colocarla en situación de desamparo respecto de quien tenía el deber de cuidar ya que la misma en esos momentos estaba incapacitada de valerse por sí misma y Abraham no le dio los cuidados necesarios que merecía su delicado estado de salud”. Acto seguido le imputó la autoría del delito de abandono de persona agravado por el resultado muerte de la víctima y agravado por el vínculo. Becerra, al informar la calificación legal, recalcó que es provisoria ya que todavía se encuentra pendiente el resultado final de la autopsia de la víctima debido a la feria judicial.
La declaración de la empleada fue crucial para identificar a Sucar como el posible autor de las lesiones que presentaba su madre. La mujer contó que desde junio de 2023 iba una vez por semana al domicilio de la víctima y que en ese lapso de tiempo pudo observar diversas heridas y moretones que presentaba Giménez en su cuerpo. Según dijo, la mujer al comienzo le decía que el origen de las lesiones se debía a diversos accidentes domésticos, hasta que en abril le contó que su hijo Abraham era quien la agredía. Al consultarle si quería denunciarlo o alertar a sus hijas de la situación, la víctima dijo que no porque no quería que su hijo fuera preso.
La empleada guardó silencio hasta que a comienzos de mayo Abraham la llamó para avisarle que su mamá se había caído de cabeza en tres oportunidades y que estaba preocupado porque había estado tres días sin despertarse y cuando lo hizo balbuceaba. El 9 de julio la empleada fue al domicilio y pidió ver a Giménez. “La señora estaba acostada sobre la base del sommier y el colchón parado al costado. Ella estaba sobre diarios, sin sábanas, sin mantas y sólo vestía una musculosa, un pañal y un par de medias. Tenía un ojo morado y sobresalido por las piñas y la cabeza inflamada; temblaba porque tenía frío. El hijo la trataba mal y la gritoneaba. La señora tenía reventado el cuerpo y no la llevó a un médico”, citó Becerra.
Luego de este episodio, la empleada denunció la situación en la OVD. Al día siguiente, se excluyó a Sucar de la vivienda y fue personal del cuerpo de peritos médicos. Cuando llegaron observaron que las condiciones sanitarias del lugar no eran adecuadas y manifestaron que Giménez necesitaba ser internada urgentemente porque estaba en grave estado con peligro de vida.
Hombre violento
Los investigadores entrevistaron a las hermanas de Abraham, Andrea y Mariana Sucar, quienes definieron al hombre como una persona violenta. Según contaron, ya habían vivido situaciones de violencia en 2019 pero no creían que su madre corriera peligro de vida. Además dijeron que no lo denunciaban por miedo a que su hermano tomara represalias en contra de sus hijos y del resto de sus familias ya que él las amenazaba y les decía que tenía contactos políticos. También manifestaron que no tenían mucho contacto con su madre por conflictos con Abraham, y que las veces que le vieron lesiones en el cuerpo, la mujer aludía a que fueron provocados durante accidentes domésticos.
La representante del MPF solicitó que Sucar fuera sometido a 60 días de prisión preventiva para resguardar las medidas investigativas restantes y disminuir el riesgo de fuga. La defensora Flavia Barraza se opuso a la formulación de cargos y a la medida de coerción de máxima intensidad. Finalmente, el juez Alejandro Tomas dispuso la prisión preventiva para Sucar por 60 días.