Coparticipación federal: en este escenario, todos pierden

Las transferencias automáticas a las provincias siguen siendo menores a las previstas, mientras mes a mes desaparecen las partidas discrecionales.

Coparticipación federal: en este escenario, todos pierden

La preocupación es general, pero el impacto es diferencial. Las transferencias de los fondos de coparticipación federal siguen siendo materia de preocupación para los gobernadores que todavía no pueden recomponer los ingresos nacionales, ya que no se siente el impacto de la restitución del pago del impuesto a las Ganancias para los trabajadores de la cuarta categoría. Con suerte, las provincias podrán ver los primeros resultados a fines de este mes, y el impacto real se observará en octubre, de acuerdo con las estimaciones oficiales.

La recesión económica golpeó las recaudaciones nacional y provincial. La inflación también impactó, aunque con el proceso de desaceleración de los precios, es probable que el escenario se revierta. A ese panorama de contracción de ingresos se suma otro factor que cada vez es más notorio: la paulatina desaparición de los recursos discrecionales o transferencias no automáticas que la Casa Rosada solía distribuir políticamente entre las 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).

En los primeros ocho meses del año, las transferencias no automáticas a provincias y CABA totalizaron $ 645.288 millones en etapa devengada y $ 527.179 millones en etapa pagada. Esas cifras equivalen a una baja real de 79,8% y 81,9% respectivamente, indica un reporte elaborado por Politikon Chaco. En el caso de Tucumán, la caída ha sido cercana al 83% al comparar con igual período del año pasado.

En relación con la situación por distrito subnacional, Buenos Aires (43,8% del total), CABA (17,4%) y Santa Cruz (3,4%) exhiben el mayor volumen en transferencias devengadas; e igual posición ocupan en los envíos pagados (43,5%, 17,2% y 3,6% del total respectivamente), situación explicada principalmente por los envíos captados para funcionamiento de hospitales. Tucumán participa con el 2,5% del total.

En agosto, además, la baja de los recursos discrecionales pagados por la Nación a la provincia descendieron un 60%, en términos reales (tomando en cuenta el proceso inflacionario), de un año a otro. El dinero girado ascendió el mes pasado a los $ 3.972 millones. De esa partida, $ 2.379 millones fueron aportados por la Casa Rosada para los comedores escolares; otros $ 479 millones para el Proyecto de Cobertura Universal de Salud Efectiva, financiado por el Banco Interamericano de Reconstrucción y Fomento (BIRF); $ 460 millones para la Mejora y Desarrollo de la Infraestructura Municipal, un programa motorizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y $ 653 millones para destinos varios.

Respecto de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), durante el mes pasado, por segundo mes consecutivo, no se repartieron. Por ende, el acumulado de 2024 continúa con distribución total de ATN por $ 26.300 millones, mientras que el fondo tiene un remanente sin distribuir por $ 383.175 millones, señala Politikon Chaco.

Por habitante

La preocupación de los gobernadores, sin embargo, se focaliza en el giro de coparticipación, esa que se distribuye de acuerdo con porcentajes de la torta recaudatoria nacional. Las caras largas están relacionadas con el escaso poder de fuego que tienen los mandatarios provinciales para atender contingencias financieras locales, en un período en el que la baja de Ingresos Brutos no contribuye a mejorar el nivel de ingresos.

Según un informe elaborado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), en los primeros ocho meses del año, la caída real de las transferencias automáticas a provincias y CABA equivalen a $ 4,8 billones en moneda de agosto de 2024. “Lógicamente, las jurisdicciones más grandes son las que registran la mayor pérdida en valor absoluto”, advierte el director de esa entidad, el economista cordobés Nadin Argañaraz.

Si se relativiza la pérdida dividiendo por número de habitantes, de modo tal de aproximar la pérdida per cápita, se tiene que las tres jurisdicciones más perjudicadas fueron Tierra del Fuego, Catamarca y Formosa con $ 284.000, $ 276.000 y $ 260.000, respectivamente.

En el otro extremo, los habitantes menos perjudicados por la caída real de la recaudación coparticipable fueron los de CABA, Buenos Aires y Mendoza, con pérdidas per cápita de $ 27.000, $ 65.000 y $ 89.000.

¿Dónde se ubicó Tucumán? En el análisis del Iaraf, el distrito gobernador por Osvaldo Jaldo se encuentra en el lote intermedio de los perjudicados por la baja de ingresos con una pérdida per cápita de $ 120.101, según datos de la Dirección Nacional de Asuntos Provinciales.

Desarrollo social: recortes observados en agosto

En un contexto recesivo y de caída de ingresos, los programas de Desarrollo Social no tienen el financiamiento necesario. El programa Potenciar Trabajo recorta un 79% de su ejecución. Situación similar vive el programa de Apoyo al Plan Nacional de Primera Infancia, con una caída del 75%. Finalmente, el programa de Comedores Comunitarios y Merenderos sufre un ajuste real superior al 85%, según un estudio del Centro de Economía Política Argentina (CEPA).

Previsionales: el impacto en seguridad social

Al analizar la ejecución con un grado mayor de desagregación, es decir por partidas programáticas, se observan caídas en los principales programas de la Seguridad Social. Entre ellos, se ajusta fuertemente la PUAM, Pensión Universal para el Adulto Mayor, con un ajuste del 44%; las pensiones no contributivas, con una caída del 8%, y las transferencias a la Seguridad Social y Organismos Descentralizados, fundamentalmente el PAMI, con un recorte del 44%, indica el informe del CEPA.

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