El psicólogo tucumano involucrado en el caso Loan irá a la cárcel

Rossi Colombo esperaba la libertad, pero le dictaron la prisión preventiva junto a otras nueves personas

SIN NOVEDADES. Ayer se cumplieron cuatro meses de la desaparición de Loan y nada se sabe de su paradero. SIN NOVEDADES. Ayer se cumplieron cuatro meses de la desaparición de Loan y nada se sabe de su paradero.

“Hasta aquí no sé nada. Nadie me notificó de una resolución de estas características. Es algo que no se puede creer”, aseguró Patricio Char, el defensor del psicólogo tucumano Esteban Federico Rossi Colombo (43 años) al que se le dictó la prisión preventiva por su participación en el caso Loan. El profesional esperará ahora que se determine a qué cárcel federal lo enviarán.

Loan Danilo Peña desapareció el 13 de junio cuando participaba de un almuerzo familiar en un paraje rural de la localidad correntina de 9 de Julio. La Justicia ordinaria, cuando descubrió que se podría tratar de un caso de trata de personas, envió al expediente a la Justicia Federal que imputó a Antonio Benítez, Daniel “Fierrito” Ramírez, Mónica Millapi y Laudelina Peña de haber captado al pequeño y entregado al ex marino Carlos Guido Pérez y a su esposa María Victoria Caillava para que se lo llevaran a terceros. En tanto que el comisario Walter Maciel, que estuvo al frente de la investigación la primera semana, fue acusado de haber realizado maniobras de encubrimientos para que no se supiera que ocurrió con el pequeño.

Pero en medio de la investigación surgió otro dato. Con el aval del intendente local, Hugo Ynsarraulde, Camila Peña, hija de Laudelina, su hermana menor de edad y los niños que estuvieron presentes cuando Loan fue visto por última vez, fueron alojados en un hotel de esa localidad. Allí fueron atendidos durante varias semanas por un equipo que lideraban los abogados Alan Cañete y Elizabet Cutaia.

Luego se sumaron Nicolás Gabriel Soria (42) (un enigmático personaje que dijo que trabajaba para las fuerzas de seguridad de Estados Unidos y que su misión era proteger a los pequeños), el esposo de Cutaia, Pablo Noguera (43), el abogado y policía de la Ciudad de Buenos Aires, Leonardo Rubio (38), la abogada Delfina Taborda (22), la psicóloga social Verónica Machuca Yun, la operadora de violencia familiar Valeria López (50), el estudiante de psicología social Pablo Núñez (26) y Rossi Colombo.

El profesional tucumano, como todos los otros sospechosos, en la declaración indagatoria realizada el 14 de septiembre, dijo que él había sido convocado por la Fundación Dupuy para brindar contención a los niños que habían tenido alguna participación en el caso. Ramón Dupuy, titular de la entidad, desmintió esa posibilidad, a pesar de que la mayoría de los señalados colaboran con él. Más allá de esta polémica, Rossi Colombo señaló que su madre le había costeado los pasajes a Corrientes y que no percibió ningún pago por la tarea que realizó, sí reconoció que le entregaron $100.000 para que costeara los gastos por su estadía en 9 de Julio.

Sobre el trabajo que realizó informó que sólo había acompañado a los pequeños en sus juegos y que su misión era contenerlos.

Un incidente

La investigación de esta arista del caso se inició por un incidente. Cuando la jueza Cristina Pozzer Penzo se enteró de esa situación, ordenó realizar un allanamiento en el hotel para ver qué ocurría. Personal de Prefectura Naval tuvo que detener a Soria para cumplir con la orden, ya que él y las otras personas impidieron que ingresaran al lugar. A partir de allí comenzó a analizar la conducta de este grupo. El primer en ser detenido fue el tucumano y luego continuaron todos los otros.

La magistrada se tomó su tiempo y decidió acusarlos de los delitos que van desde atentado y resistencia a la autoridad, falso testimonio agravado, estafa calificada, violación de medios de prueba, violación de secreto profesional, fraude a la administración pública y encubrimiento agravado hasta privación ilegítima de la libertad. En las últimas horas dio un paso más: les dictó a todos la prisión preventiva.

Entre otros argumentos, la magistrada sostuvo: “El caso concreto y visible de la obstaculización de este grupo emerge del día en que Prefectura pretendió realizar un acto habitual como es el reconocimiento de quienes estaban en el interior del denominado ‘hotel’, aunado a que contaban con una orden judicial al estar menores adentro”.

La magistrada añadió que no fue posible realizar el procedimiento “por las acciones que ellos habrían desplegado para evitar que narren lo percibido por sus sentidos de forma llana, sin intromisiones de terceros o ‘coucheos’ (coaching) resulta una faena dificultosa para las autoridades predispuestas por la casi inmediata intervención que tuvieron desde estar junto a los padres, a la abuela Catalina, a los familiares direccionando o intentando direccionar sus declaraciones sean por medios o en la justicia resulta sobradamente probado”.

En opinión de Pozzer Penzo, “el impacto es que este ‘entrenamiento’ realizado fuera del marco legal que impide estas acciones, el efecto es directo a la recolección de prueba y el impacto generado es dificultar el descubrimiento de la verdad real de los hechos como sus autores”.

Sorpresa

El dictado de la prisión preventiva contra el psicólogo tucumano se registró cuando su defensor protagonizaba una dura lucha para lograr su excarcelación. El pedido que había realizado era porque no había ninguna prueba contundente en contra de sus asistido.

El 28 de septiembre, el fiscal federal de Goya Mariano Enrique de Guzmán, y María Alejandra Mángano y Marcelo Colombo -titulares de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex)- opinaron favorablemente al pedido de excarcelación.

Entre otros, reconocieron que Rossi Colombo nunca entorpeció la investigación, confirmó su lugar de residencia, vive de los ingresos que le generan el ejercicio de su actividad como psicólogo y no tiene antecedentes penales. También compartieron que se le impongan las reglas de conducta que había ofrecido cumplir el defensor. Pero ahora su situación cambió considerablemente. De quedar a un paso de recuperar la libertad, ahora espera que la jueza defina en qué cárcel federal será alojado.

Novedades

Un informe asegura que el niño fue víctima de una red de trata y estaría vivo. La novedad se conoció días antes de que se cumplieran los cuatro meses de la desaparición de Loan. La jueza Pozzer Penzo recibió un informe elaborado por los investigadores que da cuenta que el pequeño fue víctima de una red de trata y que se encontraría vivo.

Según publicó el diario “La Nación”, dicha conclusión en que después de revisar más de 20.000 hectáreas en las adyacencias del paraje El Algarrobal, donde el niño fue visto entre las 13.52 y las 14.20 del 13 de junio, no se hallaron indicios de que el menor hubiera sido víctima de un hecho de sangre.

“Todas las búsquedas y rastrillajes con resultados negativos, no hicieron más que demostrar que el menor no se encuentra o se encontró perdido en las proximidades del paraje El Algarrobal, por lo que se presume, el mismo fue sustraído del alcance y seguridad que le brindaba su padre”, publicó el matutino porteño.

“No pasó inadvertido para los investigadores, un mensaje que una de las hijas de Laudelina, cuyo nombre no se consigna debido a que es menor, le mandó a su hermana Macarena, en el que expresó que el capitán de navío Pérez, uno de los siete detenidos, sabría dónde estaba Loan. ‘Dijo Pérez que Loan está con un hombre y que está vivo’, expresó la hermana menor de Macarena, sin precisar cómo obtuvo esa información. Según consta en el expediente, el contenido del mensaje es similar al que, al día siguiente de la desaparición del niño le envió a Macarena, con los dichos de una vidente”, escribió el periodista Gustavo Carabajal. “La tía Dionisia, que vive en Buenos Aires se contactó con una vidente que le dijo que Loan estaba en una casa muy humilde con un hombre que tenía muchos perros”, escribió la joven en el mensaje.

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