La noche de los Golden Globes dejó una galería repleta de looks increíbles, pero el revolucionario cambio elegido por Emma Stone fue el que sin dudas se llevó todas las miradas. Tanto los presentes como los tele-espectadores se hicieron la misma pregunta ante el corte pixie de la actriz: ¿tuvo que raparse?
De cabello corto, largo, ondulado, lacio, rojo, rubio y hasta mitad blanco y mitad negro azabache para interpretar a Cruela De Vil. Stone pasó por todas las posibilidades en lo que a su cabello respecta y lució cada una con una elegancia absoluta. Su aparición de anoche en la premiación recordó al corte al que Anne Hathaway tuvo que someterse para filmar "Les Miserables", la película en la que apareció totalmente rapada.
El director que eligió a Emma Stone
Ya lo dijo la propia Stone: por Yorgos Lanthimos (o junto a él) haría cualquier cosa. Todo parece indicar que la multipremiada artista accedió a quitarse toda la cabellera para el último trabajo que hizo junto al director griego, "Bugonia". Después de las nominaciones que recibió por "The Favourite" en 2018, se formó entre el cineasta y la actriz una dupla exitosa e inquebrantable.
Por eso en los últimos seis años hicieron juntos cuatro películas. La primera de ellas le valió a Stone una nominación a los Oscar como Mejor Actriz de Reparto. En la segunda, "Poor Things", logró quedarse con la estatuilla dorada, no por actriz secundaria, sino por Mejor Actriz Protagónica.
¿Por qué se rapó Emma Stone?
El año pasado, junto a "Poor Things", Lanthimos también estrenó "Kind of Kindness". En paralelo, grabó "Bugonia" que tiene nuevamente a Emma Stone como protagonista. Desde la filmación, la actriz estadounidense tuvo escasas aparciones en público, por lo que se empezó a rumorear que se había rapado.
En el Festival de Cine de Nueva York volvió a aparecer luciendo su cabellera rojiza, pero muchos especularon con que podía tratarse de una peluca. Así, su última presentación en los Golden Globes sigue sumando argumentos para pensar que en "Bugonia" podremos ver un look aún más osado.