La heladera es uno de los electrodomésticos más utilizados en los hogares y, en este marco, las personas suelen hacer usos deficientes que aumentan el consumo de energía eléctrica. Entre los temas más debatidos, en las familias surge la duda si colocar imanes en estos artefactos es una de las causas de pagar más luz.
A diferencia de aquellos electrodomésticos que sí podemos desenchufarlos, con las heladeras no podemos hacer lo mismo y ante esto es fundamental saber utilizarla. Además de pagar más de lo normal, aquellas acciones indebidas pueden acortar el uso del electrodoméstico y afectar la refrigeración de los alimentos.
Los especialistas brindan una serie de recomendaciones sobre lo que sí y lo que no debemos hacer y explican si la creencia de los imanes es verdadera o se trata de simplemente un mito.
¿Poner imanes en la heladera aumenta el consumo de luz?
Según los expertos, la creencia que indica que colocar imanes en la puerta de la heladera o un freezer hará que consuma más energía, es un mito. Sin embargo, sí puede afectar a otros aparatos tecnológicos.
Este mito ha estado presente por generaciones y aunque son objetos magnéticos que se adhieren a la puerta de metal, la energía y el calor que generan no son lo suficientemente significativos como para impactar en el consumo de energía.
“Si hablamos de imanes de heladeras convencionales que se fabrican de ferrita, crean un campo magnético bastante débil. Sin embargo, ahora se puede comprar otro tipo de imanes, de neodimio, hierro y boro, que son lo suficientemente potentes como para afectar los equipos electrónicos. En estos casos es mejor utilizar imanes de ferrita”, aseguró Yuri Mijailovski, profesor de física, a la agencia Sputnik.
Tampoco hay ninguna consecuencia en su funcionamiento que afecte negativa o positivamente alguna operación de la heladera. Lo que hace que poner estos elementos decorativos sea seguro, a no ser que alguno obstruya el cierre de la puerta, algo que sí es un problema porque el refrigerador recibirá aire caliente y deberá trabajar más.
Caso contrario sucede con los computadores, según Mijailovski. Estos dispositivos si pueden sufrir al tener imanes cerca, porque el disco duro que usa tiene “los principios de la grabación magnética” y un “magneto potente con su campo puede desmagnetizar el disco, así que hay que tener cuidado y no colgar imanes al lado de él”.
Qué prácticas sí pueden afectar el consumo de energía
Decorar una heladera con imanes no es una preocupación, como sí lo son otras costumbres que suelen tener las personas con este electrodoméstico y que sí representan un impacto en el consumo energético día a día.
Según consigna el sitio argentina.gob.ar, es de suma importancia tener en cuenta las siguientes recomendaciones para reducir el consumo de luz con nuestra heladera.
- La ubicación de la heladera es muy importante: debe estar separada de la pared de manera de permitir la circulación de aire en la parte trasera y estar alejada de los focos de calor o de la luz solar directa.
- Si estás por comprar una heladera, te recomendamos adquirir un equipo del tamaño que mejor se adapte a tus necesidades.
- Evitar introducir alimentos calientes en la heladera porque se consume más energía para enfriarlos.
- Abrir la heladera por el menor tiempo posible. Cada vez que se la abre, se pierde temperatura; recuperar esos valores genera más gasto de energía.
- Revisar que los burletes de las puertas estén en buenas condiciones. En algunos casos conviene cambiarlos para evitar pérdidas de frío y ahorrar energía.
- Limpiar, al menos una vez al año, la parte trasera del equipo.