08 Enero 2025
San Javier, a pleno: un destino que atrae a tucumanos y turistas en este verano
Demás está decir que San Javier, el corazón de la naturaleza tucumana, se presenta como un refugio perfecto para quienes buscan escapar del calor de la ciudad y disfrutar de paisajes imponentes. En un recorrido de LA GACETA por este pintoresco cerro, turistas y tucumanos disfrutan no solo de sus maravillas naturales, sino también de la calidez de su gente.
Las personas que disfrutan del verano y recorren este destino con entusiasmo, no puede evitar destacar la belleza del lugar. "Miren qué lindo está San Javier, está increíble", afirman. mientras se acercan al Cristo Bendicente, uno de los atractivos más visitados. Si bien el calor del miércoles se hace sentir, la frescura que otorgan los árboles y el aire puro de la montaña hacen que la experiencia sea más llevadera.
En el camino, los comerciantes locales comparten a nuestro diario su visión sobre la temporada turística. Darío, uno de los vendedores de artesanías, cuenta que la llegada de turistas fue constante desde antes de la Fiesta de la Virgen, y en particular, durante los fines de semana y tardes, el flujo se incrementa notablemente.
"Tenemos visitantes de Tucumán, Buenos Aires, el Sur del país y también del exterior. Muchos vienen a conocer el Cerro San Javier por primera vez, y se van fascinados por los ríos, los paisajes y la paz del lugar", explica.
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A medida que la conversación avanza, Darío destaca los productos más demandados por los turistas: desde bebidas refrescantes hasta artesanías locales como mates y estatuas del Cristo Bendicente, una réplica del famoso monumento que mide 28 metros de altura, pero aquí, en miniatura, ofrece un recuerdo único para llevarse. "La gente se lleva mucho mate y madera artesanal, especialmente de algarrobo y palo santo", detalla.
El turismo no solo deja huella en los negocios locales, sino también en la vida cotidiana de los habitantes del lugar. "Trabajo aquí con mi mamá desde los ocho años. Es un buen momento para estar en este rubro, la gente viene y se queda a disfrutar de San Javier", agrega Darío, quien ve con optimismo el presente del turismo en la zona.
Los visitantes, en tanto, sorprendidos. Mauricio y su pareja, originarios de Tafí Viejo, relatan su experiencia: "Es increíble cómo tenemos este lugar tan cerca y no lo disfrutamos. Venir aquí es una forma de desconectar y disfrutar de la tranquilidad". En cuanto a la tradición de tomar mate, ellos explican que lo prefieren "mitad y mitad, con un toque de edulcorante". Un ritual simple pero lleno de significado que resume la esencia de este pequeño pero vibrante rincón tucumano.
San Javier, con su paisaje único, su gente cálida y su oferta variada, se consolida como un destino obligado para los tucumanos y turistas que buscan disfrutar de la naturaleza, el aire fresco y la calma. Como bien dicen los visitantes: "Si estás en Tucumán, San Javier es un lugar que no podés dejar de conocer". Y con este mensaje, el cerro invita a más personas a explorar y disfrutar de sus maravillas.
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